En un hecho que sacude a Estados Unidos, la legisladora demócrata Melissa Hortman y su esposo fueron asesinados a tiros en Minnesota. El gobernador del estado, Tim Walz, calificó el ataque como un “asesinato por motivos políticos”, desatando alarma en el país.
El incidente ocurrió durante la madrugada, cuando un individuo armado irrumpió en la vivienda de Hortman. Según las autoridades, el atacante se hizo pasar por policía, portando un chaleco antibalas, una pistola y una placa falsa, lo que permitió su acceso inicial.
En un segundo ataque, el senador demócrata John Hoffman y su esposa, también de Minnesota, fueron baleados en su hogar. Ambos sobrevivieron tras someterse a cirugías de emergencia, y las autoridades son “cautelosamente optimistas” sobre su recuperación.
La policía de Brooklyn Park, liderada por el jefe Mark Bruley, reveló que el vehículo del sospechoso contenía un “manifiesto” con una lista de nombres, incluyendo los de Hortman y Hoffman. Esto sugiere que los ataques fueron planeados y dirigidos específicamente contra políticos demócratas.
El superintendente de la Oficina de Aprehensión Criminal de Minnesota, Drew Evans, informó que el atacante disparó contra los agentes en la escena del crimen de Hortman, logrando escapar en medio del caos. Hasta ahora, nadie ha sido detenido, aunque varias personas han sido interrogadas.
El presidente Donald Trump condenó los ataques, afirmando que “este tipo de violencia horrible no será tolerada en Estados Unidos”. La fiscal general, Pam Bondi, aseguró que el FBI trabaja con autoridades locales para esclarecer el caso y llevar a los responsables ante la justicia.
Estos asesinatos ocurren en un contexto de alta tensión política, horas antes de un polémico desfile militar en Washington D.C., organizado por Trump para conmemorar el 250 aniversario del ejército estadounidense. Además, más de 2,000 manifestaciones están convocadas en todo el país contra lo que algunos llaman el “autoritarismo” del gobierno.
El gobernador Walz destacó que “el discurso pacífico es la base de nuestra democracia” y llamó a resolver las diferencias sin violencia. Mientras tanto, la búsqueda del sospechoso continúa, y la comunidad de Minnesota llora la pérdida de Hortman, descrita como una “formidable servidora pública”.
La senadora Amy Klobuchar expresó su conmoción, calificando los ataques como “impactantes” y enviando sus condolencias a las familias afectadas. La investigación sigue en curso, con las autoridades instando a la población a verificar la identidad de cualquier persona que se presente como policía.
Este trágico evento ha reavivado el debate sobre la polarización política en Estados Unidos y los riesgos que enfrentan los funcionarios públicos en un clima de creciente hostilidad.