La Fiscalía General de Ecuador ha señalado al exjuez Wilman Terán como presunto responsable de una maniobra judicial que permitió la liberación del exvicepresidente Jorge Glas en noviembre de 2022. Este caso, conocido como Vidrio Libre, destapa una supuesta red de corrupción dentro del sistema judicial ecuatoriano, donde Terán y otros funcionarios habrían actuado para favorecer al exmandatario.
El proceso judicial comenzó formalmente el 13 de junio de 2025, con una audiencia de formulación de cargos en la Corte Nacional de Justicia en Quito. El fiscal Wilson Toainga acusó a Terán, expresidente del Consejo de la Judicatura, de liderar un esquema de asociación ilícita para lograr la excarcelación de Glas, quien cumplía una condena por corrupción.
Según la investigación, Terán habría redactado personalmente la solicitud de habeas corpus que permitió la liberación de Glas. Este documento fue entregado a la exjueza Anabell Torres, quien presuntamente manipuló el sorteo judicial para que el caso cayera en manos del juez Emerson Curipallo, también implicado en el caso.
Curipallo, quien firmó la orden de liberación de Glas, ya enfrenta condenas por prevaricato y delincuencia organizada en el caso Metástasis. Su testimonio anticipado reveló que Terán le ofreció protección judicial a cambio de conceder la libertad al exvicepresidente, incluyendo la promesa de archivar expedientes disciplinarios en su contra.
Además de Terán y Torres, la Fiscalía imputó a otras tres personas: el exfiscal Víctor Hugo Alcívar y los exabogados de Glas, Cristian Palacios y Edison Loayza. Según Toainga, todos formaban parte de una estructura que coordinó acciones para evadir la justicia y beneficiar a Glas.
El caso Vidrio Libre se originó a partir de evidencias recolectadas en la investigación Metástasis, que destapó una red de corrupción vinculada al narcotráfico y al sistema judicial. En este contexto, Terán enfrenta su cuarto proceso penal, lo que agrava su situación legal mientras permanece en prisión preventiva en la cárcel de máxima seguridad La Roca.
La audiencia, presidida por el conjuez Hernán Barros, no acogió el pedido de prisión preventiva para Terán, ya que este ya se encuentra detenido. Sin embargo, se impusieron medidas cautelares como prohibición de salida del país y presentaciones periódicas para Torres, Alcívar, Palacios y Loayza.
Jorge Glas, por su parte, se encuentra nuevamente en prisión tras su captura en abril de 2024 en la Embajada de México en Quito, donde buscaba asilo político. Enfrenta una condena acumulada de ocho años por corrupción y un nuevo proceso por presunto peculado en la reconstrucción de Manabí tras el terremoto de 2016.
El caso ha generado controversia en Ecuador, especialmente por las acusaciones que vinculan al expresidente Rafael Correa con la maniobra. Según el testimonio de Curipallo, Correa habría apoyado políticamente a Terán para que asumiera la presidencia del Consejo de la Judicatura a cambio de la liberación de Glas.
La investigación continúa, y la Fiscalía ha anunciado que presentará más pruebas en los próximos 90 días para esclarecer este caso que pone en evidencia las irregularidades en el sistema judicial ecuatoriano.