El gobernador de Nuevo León, Samuel García, destacó que los delitos de alto impacto en el estado han disminuido un 80% en los últimos meses, un logro que atribuye a la coordinación con las fuerzas federales y municipales. Según el mandatario, esta baja representa el mejor momento en materia de seguridad para la entidad en los últimos ocho años.
En una reunión reciente con el secretario de Seguridad federal, Omar García Harfuch, el gobernador detalló que esta reducción incluye una caída significativa en homicidios, narcomenudeo y privación ilegal de la libertad. García señaló que la colaboración con el Ejército, la Guardia Nacional y las policías locales ha sido clave para estos resultados.
Sin embargo, no todo es color de rosa. A pesar de las cifras optimistas, reportes recientes han señalado incidentes graves, como el hallazgo de restos humanos en la carretera Monterrey-Saltillo. Estos casos generan dudas sobre la profundidad de los avances en seguridad y la presencia de cárteles en la región.
El gobierno estatal asegura que la estrategia de seguridad ha permitido posicionar a Nuevo León por debajo de la media nacional en delitos de alto impacto. Según datos oficiales, en febrero de 2025, la entidad alcanzó el lugar 13 a nivel nacional, un avance respecto a años anteriores cuando figuraba entre los estados más afectados.
La Fuerza Civil, corporación estatal, ha sido un pilar en esta estrategia. García destacó que la modernización de esta fuerza, con nuevos destacamentos, patrullas y tecnología, ha contribuido a contener la delincuencia. También mencionó operativos como el Muralla y el Grupo de Coordinación Metropolitana.
A pesar de los avances, críticos han cuestionado la narrativa del gobierno estatal. Algunos señalan que las cifras podrían no reflejar la gravedad de ciertos delitos ni la actividad de grupos criminales que aún operan en la entidad. La falta de transparencia en algunos casos, como el de Rayones en mayo, alimenta estas dudas.
En el ámbito federal, el secretario Omar García Harfuch respaldó los esfuerzos en Nuevo León, destacando que la coordinación con el gobierno de Claudia Sheinbaum ha permitido desmantelar redes criminales en varias entidades. Sin embargo, la persistencia de hechos violentos en el país pone en tela de juicio la efectividad de estas estrategias.
García también celebró la baja del 73% en homicidios en comparación con junio de 2024. No obstante, la percepción ciudadana sobre la seguridad sigue siendo un desafío, ya que muchos regiomontanos aún temen salir a las calles sin protección.
El panorama en Nuevo León muestra claroscuros. Mientras el gobierno presume cifras históricas, la realidad en ciertas zonas del estado sugiere que la lucha contra la inseguridad está lejos de concluir. La coordinación con las autoridades federales será crucial para mantener esta tendencia.
Por ahora, Samuel García insiste en que Nuevo León vive un momento histórico en seguridad. La pregunta es si estas cifras se traducirán en una percepción de tranquilidad para los ciudadanos o si solo quedarán en un discurso oficial.