Una mujer vivió momentos de pánico al descubrir una boa constrictor de 1.5 metros escondida en su camioneta recién comprada en la Ciudad de México. El insólito incidente ocurrió en la alcaldía Azcapotzalco, en la colonia Barrio San Bernabé, y ha generado sorpresa entre los habitantes de la capital.
La conductora, cuya identidad no ha sido revelada, había adquirido el vehículo en una agencia automotriz ubicada en el cruce de las avenidas Cuitláhuac y Camarones. Todo parecía normal hasta que, al llegar a su domicilio en Ixtapaluca, Estado de México, sus vecinos le alertaron sobre algo inusual: una serpiente se había deslizado hasta la parte trasera de la camioneta, ocultándose cerca del tanque de gasolina.
Sin perder tiempo, la mujer decidió regresar a la agencia en la CDMX para pedir ayuda. El trayecto de 40 kilómetros desde Ixtapaluca hasta Azcapotzalco debió ser una experiencia llena de nervios, sabiendo que llevaba un reptil no venenoso, pero imponente, dentro de su vehículo.
Al llegar a la agencia, los técnicos confirmaron la presencia de la boa constrictor, pero por temor a que fuera peligrosa, evitaron manipularla. Fue entonces cuando se solicitó el apoyo de las autoridades. Elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México acudieron rápidamente al lugar.
La Brigada de Vigilancia Animal, especializada en este tipo de situaciones, tomó el control del operativo. Para rescatar a la serpiente, los expertos tuvieron que desmontar el asiento trasero de la camioneta y retirar la tapa de la bomba de gasolina, donde la boa estaba enroscada.
Con una varilla de contención, los rescatistas lograron extraer al reptil de aproximadamente 1.5 metros de longitud. La boa constrictor fue colocada en un contenedor de plástico para garantizar su seguridad y la de los presentes.
Posteriormente, la serpiente fue trasladada a las instalaciones de la Brigada de Vigilancia Animal en Xochimilco. Ahí, veterinarios especializados la revisaron para evaluar su estado de salud antes de determinar si podía ser liberada en su hábitat natural.
La boa constrictor, una especie adaptable que habita desde selvas tropicales hasta zonas semiáridas, sorprendió a todos al elegir un vehículo como refugio. Este tipo de serpientes, comunes en América Central y del Sur, pueden alcanzar hasta 4 metros de largo, aunque el ejemplar encontrado era de tamaño moderado.
El incidente ha dejado a los capitalinos hablando sobre la importancia de revisar los vehículos, especialmente los recién adquiridos. Aunque no se reportaron heridos, la experiencia fue un recordatorio de lo impredecible que puede ser la vida en una ciudad como la CDMX.
Este caso también pone en relieve el trabajo de la Brigada de Vigilancia Animal, cuya rápida intervención permitió resolver la situación sin mayores complicaciones. La mujer, por su parte, podrá contar esta historia como una anécdota que difícilmente olvidará.