La Ciudad de México se vio nuevamente azotada por intensas lluvias este 12 de junio, dejando un rastro de inundaciones, encharcamientos y caos vial en diversas alcaldías. Las precipitaciones, que sorprendieron a los capitalinos por su intensidad, generaron severas afectaciones en la movilidad y pusieron en evidencia la fragilidad del sistema de drenaje en la capital.
En la alcaldía Iztapalapa, una de las más afectadas, se reportaron inundaciones en puntos críticos como Calzada Ignacio Zaragoza y la zona de Balvanera. Decenas de vehículos quedaron atrapados en el agua, mientras los conductores enfrentaban horas de desesperación. Equipos de emergencia trabajaron arduamente para liberar los automóviles varados, pero la situación desbordó los esfuerzos iniciales.
Las alcaldías Cuajimalpa y Álvaro Obregón también sufrieron las consecuencias de las tormentas. Encharcamientos en el puente de Carlos Echánove y Julián Adame, así como en la Autopista México-Toluca, complicaron el tránsito. La caída de granizo en estas zonas añadió un desafío adicional para los automovilistas, quienes enfrentaron condiciones peligrosas en las vialidades.
El gobierno de Clara Brugada activó el protocolo Tlaloque para atender las afectaciones, pero las acciones han sido insuficientes para mitigar el impacto. La Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil reportó al menos 53 encharcamientos, con Iztapalapa concentrando la mayoría. Más de 150 técnicos, apoyados por camiones hidroneumáticos y equipos de bombeo, fueron desplegados, pero la magnitud de las lluvias superó las capacidades operativas.
El Sistema de Transporte Colectivo Metro no escapó del caos. La Línea A, que conecta Pantitlán con La Paz, suspendió el servicio en varias estaciones debido a la acumulación de agua en las vías. Los usuarios, varados en andenes y calles, enfrentaron demoras significativas, mientras el gobierno capitalino pedía paciencia sin ofrecer soluciones inmediatas.
En Tlalpan, la caída de árboles complicó aún más la situación. Un incidente en la colonia San Pedro de los Pinos dejó una vía bloqueada, obligando a los equipos de bomberos a intervenir. Las autoridades recomendaron evitar zonas inundadas, pero la falta de alternativas viales claras dejó a muchos conductores atrapados en el tráfico.
La Secretaría de Gestión Integral del Agua destacó que las lluvias alcanzaron hasta 70 milímetros en algunas zonas, un nivel que desbordó el sistema de drenaje. A pesar de los operativos, los encharcamientos persistieron en avenidas clave como Paseo de la Reforma y Viaducto, evidenciando la falta de mantenimiento en la infraestructura hidráulica.
Mientras los capitalinos lidian con las consecuencias, las autoridades han emitido alertas amarilla y naranja en varias alcaldías, advirtiendo sobre la posibilidad de más lluvias en las próximas horas. La ciudadanía, frustrada, exige respuestas claras y acciones efectivas para evitar que cada temporada de lluvias se convierta en un nuevo capítulo de caos en la Ciudad de México.