El proyecto, liderado por la Facultad de Zootecnia y Ecología, destaca la importancia de transformar desechos orgánicos en composta. Este material puede enriquecer suelos agrícolas y jardines, disminuyendo la dependencia de fertilizantes químicos. La iniciativa surge en un contexto donde México enfrenta grandes desafíos en la gestión de residuos.
En el país, se estima que el 40 por ciento de los residuos generados son orgánicos. Sin embargo, la mayoría termina en rellenos sanitarios o al aire libre, causando contaminación y problemas de salud. La UACH busca revertir esta situación con un modelo que combina educación y acción práctica.
El proceso de compostaje presentado por la universidad es sencillo pero efectivo. Consiste en recolectar residuos orgánicos, como restos de alimentos y material vegetal, para someterlos a un proceso de descomposición controlada. El resultado es un producto natural que mejora la fertilidad del suelo.
La iniciativa incluye talleres y programas educativos para estudiantes y la comunidad en general. Estos espacios enseñan cómo implementar el compostaje en hogares y pequeñas parcelas. La UACH quiere que esta práctica se extienda más allá del campus, generando un impacto positivo en Chihuahua.
El rector de la UACH, Luis Alfonso Rivera Campos, resaltó que el proyecto no solo beneficia al medio ambiente, sino que también fomenta la conciencia ecológica. La universidad planea colaborar con autoridades locales para expandir el alcance de esta iniciativa. El objetivo es que más personas adopten estas prácticas sostenibles.
Además, el proyecto aborda problemas específicos de la región, como la erosión del suelo y la acumulación de basura. Al convertir desechos en recursos útiles, la UACH propone una solución práctica para un problema global. Este enfoque podría servir como ejemplo para otras instituciones.
La presentación del proyecto ha sido bien recibida por estudiantes y académicos. Muchos ven en el compostaje una forma accesible de contribuir al cuidado del planeta. La universidad espera que esta iniciativa inspire a más personas a tomar acción por un futuro más verde.
Este esfuerzo se suma a otras campañas de la UACH, como la de “Sin Desperdicio Alimentario 2025”. La universidad reafirma su compromiso con la sostenibilidad y la educación ambiental. Chihuahua podría convertirse en un referente en la gestión responsable de residuos.
El compostaje no es solo una solución técnica, sino un cambio de mentalidad. La UACH invita a la comunidad a ser parte de esta transformación. Con pequeños pasos, como separar residuos o participar en talleres, todos pueden contribuir a un entorno más saludable.