El magnate Elon Musk sorprendió al mundo al expresar remordimiento por las críticas que lanzó contra el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, la semana pasada. En un mensaje publicado en su red social X, Musk admitió que algunas de sus publicaciones “fueron demasiado lejos”, marcando un giro inesperado en la tensa relación entre ambos.
La disputa entre Musk y Trump estalló recientemente, tras meses de una alianza que parecía sólida. Musk, quien apoyó financieramente la campaña de Trump con casi 300 millones de dólares, había criticado duramente el proyecto de ley presupuestaria impulsado por el presidente, calificándolo como una “abominación repulsiva” que aumentaría el déficit fiscal.
Trump no se quedó callado ante las críticas. En una conferencia de prensa, el presidente expresó su decepción, afirmando que Musk “perdió la cabeza” y amenazó con revisar los contratos federales con las empresas del multimillonario, como Tesla y SpaceX. Estas palabras encendieron aún más la controversia entre los dos hombres más influyentes del mundo.
El conflicto tomó un tono personal cuando Musk insinuó, sin pruebas, que Trump estaba vinculado al caso de Jeffrey Epstein. Sin embargo, el magnate dio un paso atrás al eliminar esa publicación y, días después, expresó su arrepentimiento por haber cruzado ciertos límites en sus comentarios.
A pesar del gesto de Musk, Trump no parece estar listo para reconciliarse. En una entrevista reciente, el presidente señaló que Musk “tiene problemas” y que, por ahora, no tiene intención de hablar con él. Esta postura ha generado especulaciones sobre el futuro de su relación.
La ruptura entre ambos ha causado revuelo en los mercados. Las acciones de Tesla cayeron un 14% tras el intercambio de acusaciones, lo que representó una pérdida de más de 140 mil millones de dólares en el valor de la empresa. Este impacto económico refleja la magnitud del enfrentamiento.
Musk, conocido por su estilo directo, había sido asesor de Trump en los primeros meses de su mandato, liderando esfuerzos para reducir el gasto federal. Sin embargo, su salida del gobierno marcó el inicio de las tensiones, que ahora han alcanzado un punto crítico.
Algunos analistas sugieren que el arrepentimiento de Musk podría ser un intento estratégico para proteger los intereses de sus empresas, que dependen en gran medida de contratos gubernamentales. Otros creen que la reconciliación es poco probable, dado el tono frío de Trump.
La Casa Blanca, por su parte, ha insinuado que podría haber espacio para una tregua, aunque no hay confirmación oficial. Mientras tanto, el mundo observa con atención los próximos movimientos de estas dos figuras, cuya influencia trasciende fronteras.
Este enfrentamiento no solo revela las complejidades de la política estadounidense, sino también el poder que ambos hombres ejercen en la economía global. La pregunta ahora es si Musk y Trump podrán superar sus diferencias o si esta ruptura marcará un antes y un después en su relación.

Imagen generada por IA con fines informativos o representativos. Digital Plural se deslinda de cualquier uso o interpretación.
Elon Musk se arrepiente de atacar a Trump: ¿Se avecina una reconciliación?
Compartir: