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A un año del Mundial 2026: México se prepara para brillar como coanfitrión mientras el Tri sueña con el histórico sexto partido

El 11 de junio de 2026 marcará un hito histórico para México, cuando el Estadio Azteca sea el escenario inaugural del Mundial de fútbol, un evento que compartirá con Estados Unidos y Canadá. Este torneo será la tercera vez que México albergue una Copa del Mundo, un logro sin precedentes que pone al país en el centro del escenario deportivo global.
El Estadio Azteca, ícono del fútbol mundial, está en plena remodelación para recibir cinco partidos, incluyendo el encuentro inaugural donde la Selección Mexicana enfrentará a un rival aún por definirse en el sorteo de diciembre. Este recinto, testigo de los triunfos de Pelé en 1970 y Maradona en 1986, se prepara para volver a ser el epicentro de la pasión futbolística.
Guadalajara y Monterrey también tendrán un papel protagónico, con cuatro partidos cada una en los estadios Akron y BBVA. México albergará un total de 13 encuentros, consolidándose como una sede clave en este torneo ampliado de 104 partidos, que incluirá 48 selecciones por primera vez en la historia.
La Selección Mexicana, bajo la dirección de Javier Aguirre, enfrenta el desafío de superar el estigma de no alcanzar el quinto partido desde 1986. El objetivo es ambicioso: llegar al sexto encuentro, un sueño que ilusiona a millones de aficionados, pero que requiere un desempeño impecable en la cancha.
A pesar del entusiasmo, el Tri arrastra retos importantes. La falta de líderes en el terreno de juego y los conflictos internos en la Federación Mexicana de Fútbol han generado incertidumbre. La reciente salida de Juan Carlos Rodríguez como comisionado presidente refleja el desorden administrativo que podría afectar la preparación del equipo.
En el ámbito deportivo, México ya tiene programados amistosos clave para 2025, incluyendo duelos contra Japón y Corea del Sur en septiembre, como parte de su camino hacia el Mundial. Además, la Copa Oro, que se disputará del 14 de junio al 6 de julio, será una prueba crucial para evaluar el nivel del equipo.
Fuera de la cancha, los gobiernos estatales trabajan en garantizar la seguridad para jugadores y aficionados, un aspecto fundamental para el éxito del evento. La experiencia de México en organizar grandes celebraciones deportivas promete convertir el Mundial en una fiesta que trascienda lo futbolístico.
El contexto internacional agrega un matiz adicional. Las tensiones comerciales entre México, Estados Unidos y Canadá, marcadas por los aranceles impuestos por la administración de Donald Trump, podrían complicar la logística, aunque expertos consideran que no afectarán el espíritu festivo del torneo.
A un año de la inauguración, México ha encendido la cuenta regresiva. La ilusión de ver al Tri brillar en casa y la oportunidad de mostrar al mundo su hospitalidad y pasión por el fútbol están más vivas que nunca. El camino hacia el Mundial 2026 ya ha comenzado.

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