El gobierno de Jalisco, encabezado por Pablo Lemus, ha entregado 678 nuevas patrullas a la Policía Estatal, un movimiento que busca fortalecer la seguridad en los 125 municipios del estado. Entre los vehículos destacan las llamativas unidades Cybertruck de Tesla, valuadas en 2.2 millones de pesos cada una, que han generado controversia por su alto costo y su uso en labores de proximidad ciudadana.
La entrega incluye camionetas tácticas Black Mamba y vehículos con blindaje ligero, diseñados para operar tanto en el Área Metropolitana de Guadalajara como en regiones rurales. Según Lemus, el objetivo es garantizar una patrulla nueva por municipio, reforzando la presencia policial en todo Jalisco. Sin embargo, la elección de vehículos de lujo como los Cybertrucks ha levantado dudas sobre si la prioridad es la eficiencia o la imagen pública.
La inversión total asciende a 970 millones de pesos, una cifra significativa que, según el gobierno estatal, busca dignificar el trabajo de los policías. Las patrullas Cybertruck, en particular, están equipadas con tecnología avanzada, como conexión a Starlink, que permitirá acceder a bases de datos en tiempo real, incluso en zonas sin señal. Esto, aseguran, convertirá a estas unidades en centros de comando móviles para tareas de inteligencia.
Pese a los anuncios, la percepción de inseguridad en Jalisco sigue siendo alta. Datos de la Encuesta de Seguridad Pública Urbana revelan que el 55% de la población se siente insegura, aunque el 56.3% confía en la Policía Estatal. En municipios como Tlajomulco y Tlaquepaque, la sensación de inseguridad ha aumentado, lo que pone en duda el impacto inmediato de estas nuevas unidades.
El gobierno de Lemus defiende la adquisición, argumentando que los vehículos de alto impacto visual mejorarán la percepción de seguridad. Sin embargo, críticos cuestionan si el gasto en patrullas de lujo es la mejor forma de abordar los problemas de delincuencia en el estado. La estrategia incluye reforzar la vigilancia en carreteras y zonas urbanas, pero no se han detallado planes concretos para reducir los índices delictivos.
Además de las patrullas, Jalisco está modernizando su sistema de videovigilancia con una inversión de 6 mil 377 millones de pesos. Esto incluye mil 500 nuevas cámaras con inteligencia artificial y la actualización de casi 7 mil cámaras existentes. El proyecto busca conectar los sistemas de monitoreo municipales con el Escudo Urbano C5, pero su implementación aún está en proceso.
La entrega de estas patrullas se suma a otras acciones del gobierno de Movimiento Ciudadano, como la creación de la Policía Estatal de Caminos, que busca vigilar más de 4 mil kilómetros de carreteras en el estado. Aunque estas iniciativas suenan prometedoras, la ciudadanía espera resultados tangibles en la reducción de la violencia y el crimen.
Mientras el gobierno presume estas adquisiciones como un paso hacia la modernización, queda la incógnita de si estas medidas serán suficientes para enfrentar los retos de seguridad en Jalisco. La población, cansada de promesas, espera que las nuevas patrullas no sean solo un espectáculo, sino una herramienta efectiva para recuperar la tranquilidad.