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Renuncia en el INAH: Crisis de Seguridad Deja Museos a la Deriva

El responsable de Seguridad y Resguardo del Patrimonio Cultural del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Pedro Alberto Velázquez Castro, presentó su renuncia tras una polémica que paralizó varios museos en la Ciudad de México. La decisión llega después de que recintos culturales de gran importancia cerraran sus puertas debido a problemas con la seguridad, generando críticas y preocupación entre visitantes y trabajadores.
La Secretaría de Cultura, encabezada por Claudia Curiel de Icaza, anunció que aceptó la renuncia de Velázquez Castro, quien enfrentó fuertes cuestionamientos por el manejo de una licitación para los servicios de vigilancia. La transición de la Policía Auxiliar a una empresa privada desencadenó una crisis que dejó sin protección a museos emblemáticos, poniendo en riesgo el patrimonio cultural del país.
El pasado 3 de junio, museos como el Nacional de Antropología, el Castillo de Chapultepec, el Templo Mayor, el Museo del Carmen y el de las Intervenciones cerraron de manera abrupta. La razón fue la falta de personal de seguridad, luego de que la empresa privada adjudicada no cumpliera con el contrato que entró en vigor el 1 de junio. Visitantes nacionales y extranjeros expresaron su frustración al encontrar los recintos cerrados sin previo aviso.
Trabajadores del INAH señalaron que la licitación, gestionada bajo la dirección de Velázquez Castro, careció de planeación adecuada. Denunciaron que la decisión de reemplazar a la Policía Auxiliar por una empresa privada generó un vacío en la vigilancia, dejando vulnerable el patrimonio cultural. Incluso se reportaron pancartas en los museos donde se acusaba a las autoridades de negligencia y corrupción.
La secretaria de Cultura, Claudia Curiel de Icaza, intervino para exigir al director general del INAH, Diego Prieto, que resolviera el problema de inmediato. Como medida emergente, se decidió que la Policía Auxiliar de la Ciudad de México retomara el control de la seguridad en los recintos, permitiendo su reapertura el 5 de junio. Sin embargo, el daño a la imagen del INAH y la molestia de los visitantes ya estaban hechos.
La presidenta Claudia Sheinbaum también se pronunció al respecto, asegurando que el problema se originó por un retraso en la adjudicación de la licitación. En conferencia de prensa, afirmó que los museos ya estaban abiertos y que la vigilancia estaría a cargo de la Policía Auxiliar, descartando por ahora el uso de empresas privadas. No obstante, no aclaró si el contrato con la empresa fallida será cancelado.
El cierre temporal de los museos coincidió con un momento desafortunado: el Museo Nacional de Antropología recibió el Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2025. La distinción, que debería haber sido motivo de celebración, quedó opacada por la controversia y las críticas hacia la gestión del INAH, que expuso la fragilidad en la protección del patrimonio cultural.
Trabajadores y guías de los museos, como Jesús Torres, denunciaron que la crisis no es un hecho aislado. Señalaron problemas recurrentes en los recintos, como la falta de recursos básicos, desde agua hasta papel higiénico, atribuyéndolos a la falta de presupuesto y a una administración deficiente. Estas declaraciones han avivado el debate sobre la capacidad del INAH para resguardar el legado cultural de México.
La Secretaría de Cultura prometió revisar los convenios de seguridad y servicios generales para evitar futuros cierres. Mientras tanto, el INAH aseguró que la empresa privada enfrentará sanciones, que podrían incluir multas o la rescisión del contrato. Sin embargo, las críticas persisten, y la renuncia de Velázquez Castro no parece suficiente para calmar las inquietudes sobre la protección del patrimonio nacional.
La reapertura de los museos ha sido bien recibida, pero la crisis dejó en evidencia las fallas en la planeación y la falta de coordinación entre las autoridades. La situación ha generado un llamado a fortalecer los mecanismos de vigilancia y a garantizar que los recintos culturales, pilares de la identidad mexicana, no vuelvan a quedar en la incertidumbre.

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