El gobierno de Jalisco, encabezado por Pablo Lemus Navarro, ha dado un paso significativo al entregar 90 millones de pesos a 156 asociaciones civiles a través del programa Yo Jalisco. Este presupuesto, considerado histórico, busca respaldar proyectos que beneficien a miles de familias en el estado, enfocándose en sectores vulnerables.
Las asociaciones beneficiadas trabajan en áreas clave como salud mental, rehabilitación de adicciones, enfermedades renales y apoyo a niños con cáncer. También se incluyen programas para mujeres víctimas de violencia, personas con discapacidad y seguridad alimentaria, lo que refleja un esfuerzo amplio por atender problemáticas sociales urgentes.
En la modalidad de coinversión, 61.8 millones de pesos se destinaron a 149 organizaciones que abordan estas causas. Además, 23 millones se enfocaron específicamente en el cáncer infantil, con énfasis en tratamientos oncológicos, mientras que otros recursos apoyarán albergues y proyectos de bienestar social.
La entrega de estos apoyos se llevó a cabo en un evento donde participaron figuras como la secretaria del Sistema de Asistencia Social, Priscilla Franco Barba, y la diputada Mónica Magaña Mendoza. Ambas destacaron la importancia de la colaboración entre el gobierno y la sociedad civil para maximizar el impacto de los recursos.
El programa Yo Jalisco no solo representa una inversión económica, sino también un compromiso con la mejora de la calidad de vida de los jaliscienses. Las asociaciones civiles, reconocidas por su labor cercana a las comunidades, serán las encargadas de llevar estos recursos a quienes más los necesitan.
Entre los beneficiados se estima que más de 20 mil personas recibirán atención directa. Desde tratamientos médicos hasta programas de apoyo psicosocial, los proyectos financiados buscan generar un cambio tangible en las comunidades más desfavorecidas del estado.
La selección de las organizaciones se realizó con un proceso transparente, priorizando a aquellas con experiencia comprobada en el trabajo con poblaciones vulnerables. Esto garantiza que los fondos se utilicen de manera eficiente y lleguen a su destino final.
Para el gobierno estatal, esta iniciativa es un ejemplo de cómo la colaboración entre instituciones y sociedad civil puede transformar realidades. La inversión busca no solo atender necesidades inmediatas, sino también sentar las bases para un desarrollo social sostenible en Jalisco.
Este esfuerzo también responde a la necesidad de fortalecer el tejido social en un contexto donde las problemáticas como la pobreza y la exclusión persisten. Las asociaciones civiles, con su conocimiento del terreno, son aliadas clave en esta tarea.
Con esta entrega, Jalisco reafirma su compromiso con el bienestar de su gente, mostrando que la unión de esfuerzos puede generar resultados concretos. Los proyectos apoyados prometen llevar esperanza y soluciones a miles de familias en el estado.