El gobierno de Ecatepec, encabezado por la alcaldesa Azucena Cisneros, ha anunciado un ambicioso proyecto para reducir el riesgo de inundaciones en 154 colonias de la Quinta Zona. Este plan, que busca mitigar un problema que afecta a miles de familias cada temporada de lluvias, incluye la instalación de nuevos equipos de bombeo hidráulico en el Circuito Exterior Mexiquense. Sin embargo, las promesas de soluciones a este problema recurrente generan escepticismo entre los habitantes, quienes han visto planes similares en el pasado sin resultados contundentes.
El proyecto surge de un convenio entre el gobierno del Estado de México, liderado por Delfina Gómez, y el ayuntamiento de Ecatepec. La colaboración busca coordinar esfuerzos para fortalecer el sistema de drenaje municipal, especialmente en áreas vulnerables cercanas al Circuito Exterior Mexiquense. La falta de mantenimiento en la infraestructura hidráulica durante años ha agravado las inundaciones, dejando a comunidades enteras bajo el agua tras lluvias intensas.
La empresa Aleatica, operadora del Circuito Exterior Mexiquense, aportará más de 138 millones de pesos para financiar la adquisición e instalación de los equipos de bombeo. Este presupuesto, gestionado a través del Sistema de Autopistas, Aeropuertos, Servicios Conexos y Auxiliares del Estado de México (SAASCAEM), busca garantizar un desalojo eficiente de aguas pluviales y residuales. Sin embargo, la transparencia en el uso de estos recursos y la efectividad de las obras son cuestionadas por los vecinos, cansados de promesas incumplidas.
Daniel Sibaja González, secretario de Movilidad del Estado de México, destacó que el proyecto no solo se enfoca en infraestructura vial, sino también en mejorar la calidad de vida de los habitantes. Según el funcionario, SAASCAEM trabajará con Aleatica para asegurar que los equipos cumplan con las especificaciones técnicas necesarias. Pero la pregunta sigue en el aire: ¿será suficiente para resolver un problema que lleva años afectando a Ecatepec?
La alcaldesa Azucena Cisneros afirmó que el municipio proporcionará apoyo técnico, logístico y administrativo para garantizar el éxito del proyecto. Entre las acciones, se contempla la integración de los nuevos equipos al sistema de drenaje municipal, aunque no se han dado detalles específicos sobre los plazos de ejecución ni los mecanismos de supervisión. La opacidad en estos puntos genera dudas sobre la implementación real de las obras.
Las inundaciones en Ecatepec no son un problema nuevo. Cada temporada de lluvias, colonias como Guadalupe Victoria, Rústica Xalostoc y Santa María Tulpetlac sufren encharcamientos que afectan viviendas, comercios y el transporte público, como el Mexibús. La acumulación de basura en drenajes y la falta de infraestructura adecuada han sido señaladas como las principales causas. Este nuevo proyecto promete atacar estos problemas, pero los antecedentes de abandono en la infraestructura hidráulica no inspiran confianza.
El gobierno estatal ha prometido que un comité técnico supervisará las especificaciones de los equipos y su instalación. Además, se creará un fideicomiso para administrar los recursos, lo que supuestamente garantizará un manejo responsable del presupuesto. Sin embargo, los habitantes de las colonias afectadas exigen resultados concretos y no solo anuncios que suenan bien en el papel.
La Quinta Zona de Ecatepec, una de las más vulnerables a inundaciones, espera que esta iniciativa marque una diferencia real. Los residentes, que han perdido muebles, electrodomésticos y hasta vehículos por las lluvias, demandan acciones inmediatas y efectivas. Mientras tanto, el gobierno municipal y estatal tendrán que demostrar que esta inversión no es solo un parche temporal para un problema estructural que lleva décadas sin resolverse.
El historial de inundaciones en Ecatepec pone en duda la capacidad de las autoridades para cumplir con lo prometido. En los últimos años, lluvias intensas han dejado imágenes desoladoras: calles convertidas en ríos, autos atrapados y familias evacuando sus hogares. La ciudadanía espera que este nuevo esfuerzo no se quede en buenas intenciones y realmente transforme la realidad de las 154 colonias afectadas.
A pesar de los anuncios, la verdadera prueba para el gobierno de Ecatepec será la temporada de lluvias de 2025. Solo entonces se sabrá si los equipos de bombeo y las obras hidráulicas cumplen con su propósito o si las colonias seguirán enfrentando el mismo drama año tras año. La paciencia de los habitantes está al límite, y los resultados hablarán más que las palabras.