Un violento enfrentamiento entre autoridades mexicanas y civiles armados en la frontera entre Chiapas y Guatemala dejó un saldo de cuatro muertos, según reportes de seguridad. El choque ocurrió en Frontera Comalapa, cerca de La Mesilla, una zona conocida por su alta actividad delictiva y la disputa entre grupos criminales.
Elementos de la corporación especial “Pakal” de la Secretaría de Seguridad de Chiapas se vieron involucrados en el incidente. Según versiones preliminares, los agentes perseguían a presuntos delincuentes cuando cruzaron la línea fronteriza hacia Guatemala, desatando un tiroteo en territorio extranjero.
El enfrentamiento comenzó cuando los civiles armados abrieron fuego contra los agentes mexicanos. La respuesta de las fuerzas de seguridad resultó en la muerte de cuatro presuntos delincuentes. Sin embargo, la situación se complicó al involucrar a elementos del Ejército guatemalteco, quienes reaccionaron ante la incursión no autorizada.
Videos circulando en redes sociales muestran a policías mexicanos en suelo guatemalteco, enfrentándose tanto a civiles armados como a militares de ese país. En las imágenes, se observa a los agentes de la unidad “Pakal” siendo confrontados por un grupo armado que les exige bajar de sus vehículos.
La Secretaría de Seguridad de Chiapas insiste en que el enfrentamiento ocurrió en territorio mexicano, específicamente en Frontera Comalapa. Sin embargo, autoridades guatemaltecas han confirmado que el incidente tuvo lugar en La Mesilla, Huehuetenango, lo que ha generado tensión entre ambos países.
La región fronteriza entre Chiapas y Guatemala lleva años sumida en un clima de violencia. Grupos del crimen organizado, como el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación, se disputan el control de rutas clave para el tráfico de drogas, armas y personas, dejando a comunidades enteras atrapadas en el fuego cruzado.
La falta de una estrategia efectiva para contener la inseguridad en la zona ha sido una constante. A pesar de los operativos de la Guardia Nacional y el Ejército, los enfrentamientos entre grupos criminales y autoridades no cesan, y la población local vive bajo un estado de temor permanente.
Este nuevo episodio pone en evidencia la fragilidad de la seguridad en la frontera sur de México. La incursión de agentes mexicanos en Guatemala sin autorización podría escalar las tensiones diplomáticas, mientras la violencia en la región no muestra signos de disminuir.
Las autoridades de ambos países han iniciado investigaciones para esclarecer los hechos. Sin embargo, los habitantes de Frontera Comalapa y comunidades cercanas exigen respuestas y acciones concretas para garantizar su seguridad ante la creciente ola de violencia.