La ciudad de Chihuahua enfrenta serias dificultades en el suministro de agua potable debido a la suspensión del bombeo en la batería de pozos de El Sauz, que abastece a más de 150 colonias. Los trabajos de mantenimiento realizados por la Comisión Federal de Electricidad (CFE) el viernes 6 de junio han dejado a miles de habitantes con baja presión o, en algunos casos, sin acceso al líquido vital.
El director de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento (JMAS), Alan Falomir, informó que, aunque los trabajos de la CFE concluyeron antes de lo previsto, el impacto en el suministro persiste. Los tanques de almacenamiento no han logrado llenarse al ritmo habitual, lo que ha generado un déficit significativo en la red de distribución.
Ayer, sábado 7 de junio, solo dos colonias, El Rosario y Cerro de la Cruz, reportaron una falta total de agua. Estas zonas, según Falomir, son las últimas en recibir el suministro desde el tanque principal, lo que agrava su situación. La JMAS ha enviado pipas gratuitas para mitigar las afectaciones en estas áreas.
El sistema de El Sauz es crucial para la ciudad, ya que provee 900 litros por segundo y abastece a 150 de las 700 colonias de Chihuahua. La interrupción, aunque planeada, dejó de suministrar cerca de 23 mil metros cúbicos de agua, un volumen que no se podrá recuperar de inmediato.
Falomir explicó que los tanques de distribución alcanzaron un 80 por ciento de su capacidad esta mañana, permitiendo un suministro temporal de una hora. Sin embargo, la red se vació rápidamente, ya que los ductos estaban completamente secos tras el paro.
La JMAS espera que el servicio se regularice por completo para el lunes 9 de junio, siempre y cuando no haya más imprevistos. Mientras tanto, las autoridades han destacado la importancia de que la población haga un uso racional del agua para evitar mayores complicaciones.
A pesar de las medidas tomadas, como el envío de pipas y el llenado parcial de los tanques, la situación sigue siendo crítica para muchas familias. La dependencia de un solo sistema como El Sauz pone en evidencia la vulnerabilidad del suministro en la capital del estado.
Este tipo de interrupciones no es nuevo en Chihuahua. En abril de este año, apagones de la CFE afectaron a 65 pozos, dejando sin agua a 400 mil habitantes. La falta de coordinación entre las autoridades y la CFE sigue siendo un problema recurrente.
La población de las colonias afectadas, como Revolución, Tierra y Libertad, Campesina, Granjas, Deportistas y San José, ha tenido que adaptarse a estas restricciones. Muchas familias almacenaron agua previamente, lo que ayudó a reducir las complicaciones.
La JMAS insiste en que la normalización del servicio está cerca, pero la molestia entre los habitantes crece. La falta de agua, aunque temporal, resalta la necesidad de mejorar la infraestructura y la planificación para garantizar un suministro constante en la ciudad.