En un nuevo episodio de violencia en la Ciudad de México, integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) provocaron un incendio en las oficinas del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), ubicadas en el Centro Histórico. Los hechos ocurrieron este jueves en la calle República de Argentina, en medio de las protestas que la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) mantiene desde mayo.
Los maestros disidentes, identificados como parte de la CETEG, irrumpieron por la fuerza en el edificio del SNTE. Una vez dentro, realizaron pintas, dañaron mobiliario y prendieron fuego a documentos y objetos, lo que generó una columna de humo visible desde el exterior. El caos se desató alrededor de las 13:00 horas, según reportes iniciales.
Bomberos de la Ciudad de México acudieron rápidamente al lugar para controlar el incendio. Aunque lograron sofocar las llamas, uno de los elementos requirió atención médica tras las labores de contención. Las autoridades reportaron que no había trabajadores del SNTE dentro del edificio durante el incidente, lo que evitó una tragedia mayor.
La Secretaría de Educación Pública (SEP) emitió un comunicado reprobando los actos vandálicos. En su mensaje, la dependencia llamó a los manifestantes a mantener un diálogo pacífico y respetuoso, citando la frase de Benito Juárez: “Nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho”. Sin embargo, las tensiones entre el gobierno y los maestros no parecen ceder.
Mientras tanto, otro grupo de la CNTE protestaba simultáneamente en las oficinas centrales de Pensionissste, en Buenavista. Su principal exigencia es la abrogación de la Ley del ISSSTE de 2007, además de demandas históricas como incrementos salariales y la reinstalación de trabajadores cesados. Estas movilizaciones han generado afectaciones viales en varios puntos de la capital.
Los actos violentos no se limitaron a la Ciudad de México. En Chilpancingo, Guerrero, maestros de la CETEG irrumpieron en un evento del SNTE, destruyendo mesas y sillas, y causando crisis nerviosas entre los asistentes. También se reportaron protestas en municipios como Acapulco e Iguala, aunque sin incidentes mayores.
La situación en el Centro Histórico dejó una escena de destrozos, con muebles quemados y pintas en las paredes del edificio del SNTE. Las autoridades de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) recomendaron a la ciudadanía evitar la zona para facilitar las labores de emergencia y prevenir intoxicaciones por el humo.
Las protestas de la CNTE y la CETEG han intensificado el clima de tensión en la capital mexicana. Desde mayo, los maestros mantienen un plantón en el Zócalo y han protagonizado bloqueos en avenidas clave, afectando la movilidad de miles de capitalinos. La falta de acuerdos con el gobierno federal agrava el conflicto.
Este nuevo incidente pone en evidencia la radicalización de las manifestaciones. Mientras los maestros exigen soluciones a sus demandas, los actos de violencia generan rechazo entre sectores de la población. La SEP insiste en el diálogo, pero los enfrentamientos parecen lejos de resolverse.
La Ciudad de México permanece en alerta ante posibles nuevas movilizaciones. Las autoridades locales han reforzado la presencia de cuerpos de seguridad en el Centro Histórico, aunque el panorama sigue siendo incierto. Los capitalinos enfrentan, una vez más, las consecuencias de un conflicto que no encuentra solución.