El Papa León XIV sostuvo una conversación telefónica con el presidente ruso, Vladímir Putin, en un esfuerzo por buscar soluciones al conflicto en Ucrania. Este diálogo, el primero entre ambos desde la elección del nuevo pontífice, marcó un momento clave en los esfuerzos del Vaticano por promover la paz en una región devastada por la guerra.
Durante la llamada, el Papa instó a Putin a realizar un gesto significativo que favorezca la paz en Ucrania. Según el Vaticano, el pontífice destacó la importancia del diálogo para establecer contactos positivos entre las partes involucradas y encontrar soluciones al conflicto que ya lleva más de tres años.
La conversación también abordó temas humanitarios, como la necesidad de garantizar la entrega de ayuda en las zonas afectadas. El Papa resaltó los esfuerzos para facilitar el intercambio de prisioneros y el trabajo del cardenal Matteo Zuppi, quien ha sido clave en estas iniciativas desde el pontificado de Francisco.
El llamado del Papa se produce en un momento crítico, justo después de que Putin rechazara un posible alto el fuego y una cumbre con el presidente ucraniano, Volodímir Zelensky. El líder ruso acusó a Ucrania de escalar el conflicto con ataques a infraestructura civil, lo que ha complicado las negociaciones.
León XIV también hizo referencia al Patriarca Kirill, líder de la Iglesia Ortodoxa Rusa, agradeciéndole las felicitaciones por su elección. En este contexto, el Papa subrayó cómo los valores cristianos compartidos pueden ser una guía para buscar la paz y defender la vida en medio del conflicto.
El Kremlin, por su parte, destacó que Putin expresó su interés en alcanzar la paz a través de medios políticos y diplomáticos. Sin embargo, insistió en que cualquier solución debe abordar las causas profundas del conflicto, una postura que ha generado tensiones con Ucrania y sus aliados.
El Papa y Putin también acordaron colaborar en la protección del cristianismo, especialmente en regiones como Oriente Próximo. Este compromiso refleja un interés común en preservar valores espirituales en medio de crisis globales.
La llamada, confirmada por el director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, incluyó un reconocimiento al trabajo del Vaticano en la resolución de problemas humanitarios. Putin agradeció la disposición del Papa para contribuir a estos esfuerzos sin politizar las acciones.
Este diálogo marca un paso significativo en el papel del Vaticano como mediador en conflictos internacionales. La postura de León XIV, enfocada en la paz y la reconciliación, busca influir en un escenario donde las negociaciones directas entre Rusia y Ucrania enfrentan grandes obstáculos.
El conflicto en Ucrania sigue siendo una de las mayores preocupaciones globales, y el llamado del Papa resuena como un recordatorio de la urgencia de encontrar soluciones que prioricen la vida y la dignidad de las personas afectadas.