Un terrible accidente sacudió la carretera de Cuauhtémoc, Chihuahua, dejando un saldo de dos mujeres fallecidas y cinco personas heridas, entre ellas una menor. El incidente ocurrió el pasado 1 de junio en el Libramiento Gómez Morin, un tramo conocido por su peligrosidad. La noticia ha conmocionado a la comunidad local, que exige mayor seguridad vial.
El accidente involucró un vehículo Nissan Quest, modelo 2000, que volcó a la altura del kilómetro 10+500. Según reportes, el conductor perdió el control, provocando que la camioneta saliera de la carretera. Las autoridades acudieron rápidamente al lugar, pero ya era demasiado tarde para las dos víctimas mortales.
Las fallecidas fueron identificadas como Cruz Evelia A. A., de 68 años, y Elisa G. V., de 69 años. Ambas perdieron la vida en el lugar del accidente debido a las graves lesiones sufridas. Sus cuerpos fueron encontrados a unos 20 metros del vehículo, evidenciando la violencia del impacto.
Además de las víctimas fatales, cinco personas resultaron heridas, incluyendo a una menor de 11 años, identificada como M. A., y otra persona llamada Yara Sujey A. Los heridos fueron trasladados de urgencia a hospitales cercanos para recibir atención médica. Las autoridades no han revelado el estado actual de los lesionados.
La Fiscalía de Distrito Zona Occidente se encargó de las investigaciones iniciales. Personal de Servicios Periciales recopiló evidencia en la escena, aunque aún no se ha determinado la causa exacta de la volcadura. Factores como el exceso de velocidad o las condiciones de la carretera podrían haber jugado un papel.
Este tipo de accidentes no es nuevo en la región. La carretera de Cuauhtémoc ha sido señalada en múltiples ocasiones por su falta de mantenimiento y señalización adecuada. Residentes locales han expresado su frustración ante la aparente indiferencia de las autoridades para mejorar la seguridad en esta vía.
La tragedia ha generado un debate sobre la necesidad de implementar medidas urgentes, como mayor vigilancia, mejores señalamientos y revisiones al estado de las carreteras. La comunidad espera que este incidente no quede solo como una estadística más.
Mientras tanto, las familias de las víctimas enfrentan un doloroso duelo. La pérdida de Cruz Evelia y Elisa ha dejado un vacío en sus hogares, y los heridos luchan por recuperarse. La ciudad de Cuauhtémoc se une en solidaridad ante esta tragedia que pone en evidencia los riesgos de las carreteras locales.
Las autoridades han prometido una investigación a fondo para esclarecer los hechos. Sin embargo, la ciudadanía exige resultados concretos y no solo promesas. La presión crece para que se tomen acciones inmediatas que prevengan más pérdidas de vidas.
Este accidente es un recordatorio de la fragilidad de la vida y de la importancia de conducir con precaución. La comunidad de Cuauhtémoc espera que las autoridades respondan con soluciones efectivas para evitar que tragedias como esta se repitan.