Por primera vez en semanas, Chihuahua amanece sin incendios forestales activos. La Secretaría de Desarrollo Rural del estado confirmó que, al cierre del 1 de junio de 2025, no se registran conflagraciones en bosques ni áreas naturales, un alivio tras meses de intensa actividad de fuego en la región.
El reporte, basado en datos de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), destaca que los esfuerzos de cientos de brigadistas han dado frutos. Durante mayo, Chihuahua enfrentó hasta 12 incendios simultáneos, con más de 17 mil hectáreas afectadas en municipios como Madera, Bocoyna y Guadalupe y Calvo.
Las condiciones climáticas han jugado un papel clave. Las recientes lluvias en algunas zonas del estado, combinadas con temperaturas menos extremas, han reducido el riesgo de nuevos incendios. Sin embargo, las autoridades advierten que la sequía persiste en varias regiones.
Los brigadistas, provenientes no solo de Chihuahua sino también de estados como Nuevo León, Durango y Michoacán, han trabajado incansablemente. Su labor, apoyada por coordinación interinstitucional, permitió controlar y liquidar los últimos focos activos en la Sierra Tarahumara.
A pesar de esta buena noticia, las autoridades insisten en la prevención. Actividades humanas, como quemas agrícolas y fogatas mal apagadas, son responsables de más del 90% de los incendios forestales en el estado. La ciudadanía debe permanecer alerta.
El impacto de los incendios de este año ha sido severo. Miles de hectáreas de bosques de pino y encino han sufrido daños, afectando la flora y fauna local, incluyendo especies en peligro de extinción. La recuperación de estas áreas tomará años.
Organizaciones ambientales han destacado la importancia de proteger las áreas naturales protegidas, como el Área de Protección de Flora y Fauna Cerro Mohinora. Estas zonas son vitales para el equilibrio ecológico y la captura de carbono.
La Secretaría de Desarrollo Rural hace un llamado a la responsabilidad colectiva. Aunque hoy no hay incendios, las condiciones de sequía y calor podrían reactivar el riesgo en los próximos días si no se toman precauciones.
Este logro temporal refleja el esfuerzo conjunto de autoridades, brigadistas y ciudadanos. Sin embargo, la amenaza de los incendios forestales no ha desaparecido, y la vigilancia debe mantenerse.
Chihuahua respira hoy un poco más tranquilo, pero la protección de sus bosques depende de todos. La naturaleza, duramente golpeada, agradece este breve descanso.