En Chihuahua, la jornada electoral del 1 de junio de 2025 no solo se vivió con el deber cívico, sino con un toque de sabor y tradición. Miles de ciudadanos acudieron a las casillas para participar en la histórica elección judicial, pero muchos no dejaron pasar la oportunidad de disfrutar un platillo típico antes de emitir su voto. Los puestos de comida, especialmente los de menudo, se convirtieron en puntos de reunión donde familias y amigos compartían un momento de convivencia.
El menudo, ese caldo reconfortante de pancita y maíz, se ha convertido en un símbolo de las elecciones en la región. En colonias como la Campesina o la Revolución, los puestos de comida amanecieron abarrotados desde temprano. Los comensales, entre charlas sobre los candidatos y las expectativas del día, aprovecharon para degustar este platillo que, para muchos, es sinónimo de domingo electoral.
La elección judicial marcó un hito en México, al ser la primera vez que los ciudadanos eligieron directamente a jueces, magistrados y ministros. En Chihuahua, la participación fue notable, con filas en las casillas desde las primeras horas. Sin embargo, la jornada no estuvo exenta de retos: algunos reportes señalaron demoras en la apertura de casillas y confusión entre los votantes sobre el proceso.
Mientras tanto, los aromas del menudo llenaban el ambiente. En el mercado Reforma, doña Rosa, una vendedora con más de 20 años de experiencia, comentó que los días de elecciones son de los más concurridos. Para ella, el menudo no solo es un platillo, sino una forma de unir a la comunidad en un momento clave para el país. Los clientes llegaban con sus credenciales de elector en mano, listos para votar tras un buen plato.
La tradición de comer menudo en elecciones tiene raíces profundas en Chihuahua. Algunos dicen que es una forma de “cargar energías” para tomar una decisión importante. Otros simplemente ven en el platillo una excusa para reunirse y discutir los temas del día. Sea cual sea la razón, los puestos de comida se mantuvieron como un punto de encuentro para todas las edades.
En esta jornada, la participación ciudadana fue el centro de atención. Más allá de las urnas, la convivencia en los puestos de comida reflejó el espíritu comunitario de Chihuahua. Los votantes, entre sorbos de caldo y tortillas recién hechas, intercambiaban opiniones sobre el futuro del Poder Judicial y los retos que enfrenta el país.
Aunque el proceso electoral tuvo sus complicaciones, como la falta de claridad en algunas casillas, el ánimo no decayó. Los chihuahuenses demostraron que, incluso en un día de decisiones cruciales, hay espacio para la tradición y el sabor. Los puestos de menudo, con sus mesas llenas y conversaciones animadas, fueron testigos de una jornada histórica.
El 1 de junio de 2025 quedará marcado no solo por la elección judicial, sino por la forma en que los ciudadanos de Chihuahua combinaron su deber cívico con una tradición que fortalece los lazos comunitarios. El menudo, humeante y lleno de sabor, fue el acompañante perfecto para una jornada de democracia y convivencia.