En un caso que ha conmocionado a la sociedad, Gustavo Ch. fue imputado por el feminicidio de la maestra Lizbeth Lucero Leticia Zapién, ocurrido en Parral, Chihuahua. El crimen, perpetrado el pasado 20 de mayo, ha desatado indignación debido a la violencia con la que se cometió y a las fallas en la protección de la víctima.
La maestra Lucero Zapién fue encontrada sin vida en su domicilio en la colonia Infonavit Mineros. Las autoridades determinaron que la causa de su muerte fue un traumatismo craneoencefálico, resultado de un ataque violento. Las evidencias presentadas durante la audiencia inicial señalan a Gustavo Ch. como el principal sospechoso.
Testimonios, rastros de sangre y videos de cámaras de seguridad ubican al imputado en la escena del crimen. En el vehículo de Gustavo, un Sentra color guinda, se encontraron restos de sangre humana en el volante, lo que refuerza la acusación en su contra.
En la camioneta de la víctima, las autoridades hallaron señales de forcejeo, indicando que Lucero intentó escapar de su agresor. La maestra chocó su propia cochera en un desesperado intento por huir, pero fue obligada a descender y asesinada dentro de su vivienda.
El caso ha generado críticas hacia las autoridades por su manejo previo del caso. Antes de su muerte, Lucero había denunciado a Gustavo por violencia familiar, pero las medidas de protección otorgadas no fueron suficientes para salvarle la vida.
La audiencia inicial reveló que el imputado, quien era pareja sentimental de la víctima, ya enfrentaba acusaciones por agresiones previas. A pesar de esto, no se tomaron medidas más severas para proteger a la maestra, lo que ha desatado cuestionamientos sobre la efectividad de las instituciones.
Gustavo Ch. se mantuvo prófugo durante 10 días, pero fue capturado en El Fuerte, Sinaloa, gracias al rastreo de su teléfono celular. Las autoridades lo trasladaron a Parral para enfrentar el proceso judicial, que ha captado la atención de la comunidad.
La defensa del imputado solicitó una prórroga, por lo que la próxima audiencia está programada para el 6 de junio. En esa fecha se determinará si Gustavo Ch. será vinculado a proceso por el feminicidio de Lizbeth Lucero.
La tragedia ha movilizado a colectivos feministas y a la sociedad en general, quienes exigen justicia para Lucero y una revisión exhaustiva del actuar de las autoridades. El caso pone en evidencia los retos que persisten en la lucha contra la violencia de género.
La comunidad educativa de Parral, donde Lucero era una respetada maestra, se encuentra de luto. Familiares, amigos y alumnos han marchado para exigir que este crimen no quede impune y que se tomen medidas para evitar más casos como este.