El cateo se realizó en una casa ubicada en el coto privado Livorno, sobre la avenida Mariano Otero, cerca del bosque La Primavera. Las autoridades, acompañadas por elementos del Ejército y peritos del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, trabajaron durante tres horas para recolectar evidencia. La operación se centró en recabar información que pueda estar vinculada a los delitos que se le imputan al influencer.
Alex “N” fue detenido en Puerto Vallarta, acusado de trata de personas y explotación sexual. La gravedad de los cargos ha generado una fuerte reacción en redes sociales, donde usuarios han expresado indignación y exigen justicia. La detención ocurrió días antes del cateo, lo que desencadenó la movilización de las autoridades hacia sus propiedades.
El operativo en Zapopan no fue el único. Reportes indican que las autoridades también llevaron a cabo acciones en otras viviendas relacionadas con el caso. Sin embargo, hasta el momento, no se han revelado detalles específicos sobre los hallazgos en la finca de Natura Bosque Residencial. La Fiscalía mantiene hermetismo sobre los avances de la investigación.
La detención de Alex “N” y los cateos posteriores han puesto en el centro de la atención la falta de controles efectivos contra el crimen en Jalisco. La facilidad con la que figuras públicas pueden estar vinculadas a delitos tan graves levanta preguntas sobre la vigilancia y la impunidad en el estado.
La audiencia inicial de Alex “N” está programada para el lunes en el penal de Puente Grande. Se espera que en los próximos días se den a conocer más detalles sobre las pruebas recabadas y los avances en el proceso judicial. Mientras tanto, el caso sigue generando controversia y debate en redes sociales.
La propiedad cateada, descrita como una residencia de lujo, era el lugar donde Alex “N” vivía antes de su separación. Vecinos del fraccionamiento aseguraron que la presencia de autoridades no pasó desapercibida, ya que el operativo incluyó un fuerte despliegue de seguridad con vehículos oficiales y personal armado.
Este caso pone en evidencia los problemas de inseguridad y la necesidad de una acción más contundente por parte de las autoridades. La detención de una figura conocida como Alex “N” ha generado un impacto significativo, no solo por los delitos que se le imputan, sino por la percepción de que el crimen organizado sigue operando con impunidad en Jalisco.
La investigación sigue en curso, y las autoridades han prometido que se actuará con todo el peso de la ley. Sin embargo, la ciudadanía sigue a la espera de resultados concretos que demuestren que no hay espacio para la impunidad, sin importar el estatus de los involucrados.
El caso de Alex “N” es un recordatorio de los retos que enfrenta Jalisco en materia de seguridad. La indignación pública crece, y la presión sobre las autoridades aumenta para que se esclarezcan los hechos y se haga justicia en un caso que ha conmocionado a la sociedad.