Un grave incidente sacudió la ciudad de Seúl, Corea del Sur, cuando un hombre desató un incendio dentro de un tren del metro en plena hora punta. El suceso ocurrió en la Línea 5, entre las estaciones de Yeouinaru y Mapo, causando pánico entre los pasajeros.
La Policía de Corea del Sur detuvo a un sospechoso de unos 60 años, quien presuntamente ingresó al tren con un soplete tipo encendedor y un recipiente con combustible. Según las autoridades, el hombre prendió fuego a varias prendas de ropa, desencadenando un incendio que obligó a evacuar a más de 400 personas.
El fuego se desató a las 8:47 de la mañana, hora local, generando una situación de emergencia. Los pasajeros, atrapados en el tren, tuvieron que escapar a través de un túnel, una maniobra arriesgada que dejó a 21 personas heridas. Entre las lesiones reportadas se encuentran casos de inhalación de humo y una fractura de tobillo.
A pesar de la gravedad del incidente, no se han reportado víctimas mortales. Los pasajeros y el conductor del tren lograron contener las llamas inicialmente utilizando extintores, lo que evitó una tragedia mayor. Bomberos acudieron al lugar y sofocaron el fuego por completo dos horas después.
La rápida intervención de los servicios de emergencia permitió controlar la situación, pero el incidente generó caos en el sistema de transporte público de Seúl. La Línea 5, una de las más concurridas de la capital, quedó temporalmente interrumpida, afectando a miles de usuarios.
El sospechoso, cuya identidad no ha sido revelada, fue arrestado en una estación cercana tras intentar huir de la escena. Las autoridades están investigando los motivos detrás de este acto deliberado, que ha conmocionado a la población surcoreana.
Este incidente recuerda la importancia de las medidas de seguridad en el transporte público. En Seúl, las autoridades han prometido revisar los protocolos para prevenir futuros sucesos de esta naturaleza, especialmente tras tragedias pasadas como el incendio en el metro de Daegu en 2003.
El impacto del incendio se sintió más allá de los pasajeros afectados. Las imágenes de personas evacuando por el túnel y el humo saliendo del tren circularon rápidamente en redes sociales, generando preocupación en todo el país.
Aunque el servicio en la Línea 5 se restableció horas después, el incidente dejó una marca en los habitantes de Seúl. La investigación policial sigue en curso para determinar las circunstancias exactas y posibles sanciones para el responsable.
La ciudad de Seúl, conocida por su eficiente sistema de transporte, enfrenta ahora el desafío de reforzar la seguridad para garantizar la confianza de los usuarios. Este tipo de sucesos, aunque aislados, resaltan la vulnerabilidad de los sistemas públicos ante actos deliberados.