La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Nuevo León ha levantado la voz contra la elección judicial programada para el 1 de junio, calificándola como un peligro para la democracia en México. En un pronunciamiento contundente, el organismo empresarial expresó su preocupación por los riesgos que este proceso representa para la independencia del Poder Judicial y el equilibrio de poderes en el país.
Según Coparmex Nuevo León, la elección de jueces, magistrados y ministros por voto popular abre la puerta a la politización de la justicia. Juan José Sierra Álvarez, presidente nacional de Coparmex, señaló que el proceso carece de claridad y transparencia, lo que podría permitir la injerencia de intereses políticos y partidistas. Este escenario, advierten, compromete la imparcialidad que debe caracterizar al sistema judicial.
El organismo empresarial destacó que la reforma judicial, impulsada por el gobierno federal, no garantiza un proceso equitativo ni profesional. La falta de leyes secundarias claras y la premura en la organización de la elección han generado un entorno de incertidumbre. Coparmex subrayó que más de 800 cargos judiciales están en juego, lo que hace de este proceso un momento crítico para el futuro de la justicia en México.
Uno de los puntos más alarmantes, según Coparmex, es la posible infiltración de intereses externos en la elección. Reportes de organizaciones civiles, como Defensores, han identificado al menos 18 candidatos con vínculos preocupantes, incluyendo relaciones con el crimen organizado. Este riesgo pone en jaque la confianza en el sistema judicial y la seguridad jurídica del país.
La Coparmex también criticó las fallas operativas del Instituto Nacional Electoral (INE) en la organización del proceso. Más de 316 mil solicitudes para ser observadores electorales fueron recibidas, pero solo 139 mil fueron acreditadas. Además, 48 mil solicitudes fueron rechazadas por estar vinculadas a partidos políticos o programas sociales, lo que evidencia intentos de manipulación.
Ximena Céspedes, vicepresidenta nacional de Desarrollo Democrático de Coparmex, advirtió sobre prácticas como el acarreo y la distribución de “acordeones” con instrucciones de voto. Estas irregularidades, señaló, podrían comprometer la legitimidad de la elección. La organización planea desplegar una estrategia de observación ciudadana para documentar cualquier anomalía durante la jornada electoral.
El impacto de esta reforma no se limita al ámbito judicial. Coparmex alertó que la incertidumbre generada por un proceso opaco afecta la confianza de los inversionistas. En 2024, solo el 38% de los empresarios agremiados mostró interés en realizar nuevas inversiones en México, una caída significativa respecto al 51% registrado en 2023.
La elección judicial también ha generado preocupación en el ámbito internacional. Según Coparmex, el tema de la posible infiltración del crimen organizado en el proceso ha sido señalado como un punto de presión en las negociaciones del T-MEC. Esto podría tener consecuencias económicas graves, afectando la percepción de México como destino de inversión.
Para Coparmex Nuevo León, la solución pasa por fortalecer la vigilancia ciudadana y exigir ajustes al marco normativo de la reforma. El organismo llamó a la población a participar como observadores para garantizar un proceso transparente. Sin embargo, reiteraron su rechazo a un modelo que, en su opinión, debilita los contrapesos democráticos del país.
La elección del 1 de junio marcará un precedente para el sistema judicial mexicano. Coparmex insiste en que, sin una reforma que priorice la autonomía y la profesionalización, el riesgo de un Poder Judicial controlado por intereses políticos y externos será una realidad que pagarán todos los mexicanos.