La noche del viernes 30 de mayo, un incidente alarmó a visitantes y autoridades en el corazón de la Ciudad de México. Alrededor de las 21:00 horas, un grupo de aproximadamente diez personas quedó atrapado en un elevador de la emblemática Torre Latinoamericana, ubicada en la alcaldía Cuauhtémoc. El suceso desató una rápida movilización de servicios de emergencia, quienes trabajaron intensamente para rescatar a los afectados.
El atasco ocurrió a la altura del cuarto piso del rascacielos, uno de los más icónicos de la capital mexicana, con 182 metros de altura y 44 pisos. Según reportes iniciales, las personas atrapadas permanecieron dentro del elevador por más de una hora, lo que generó preocupación entre los presentes y quienes se encontraban en el edificio.
Elementos del Heroico Cuerpo de Bomberos de la Ciudad de México acudieron al lugar tras recibir una llamada de auxilio. Junto a ellos, personal de Protección Civil y paramédicos de la Cruz Roja Mexicana se desplegaron para atender la emergencia. La operación de rescate requirió el uso de herramientas especializadas, como esmeriles y pinzas hidráulicas, para forzar la apertura de las puertas del elevador.
Como medida preventiva, la seguridad privada del edificio procedió a desalojar las áreas de restaurantes y el mirador, mientras los equipos de rescate trabajaban. Decenas de personas fueron vistas descendiendo por las escaleras de los 45 pisos de la Torre Latinoamericana, en un esfuerzo por garantizar la seguridad de todos los ocupantes.
Para las 22:00 horas, el acceso al edificio fue completamente cerrado para facilitar las labores de rescate. Los bomberos y rescatistas continuaron trabajando en el sitio, asegurándose de que las personas atrapadas fueran liberadas sin contratiempos. Afortunadamente, no se reportaron heridos ni lesionados entre los afectados.
Las autoridades no han precisado aún las causas que provocaron la falla en el elevador. Este incidente ha generado inquietud, ya que la Torre Latinoamericana es uno de los puntos más visitados del Centro Histórico de la capital, tanto por turistas como por locales.
La falta de información oficial sobre el motivo del desperfecto ha levantado preguntas sobre el mantenimiento de las instalaciones en un edificio tan representativo. Los equipos de emergencia permanecieron en el lugar para garantizar que no hubiera más riesgos para los visitantes.
Este suceso pone en el reflector los problemas de seguridad en espacios públicos de gran afluencia. Mientras las labores de rescate concluían, los testigos en el exterior observaban con preocupación el desarrollo de los hechos, esperando que situaciones como esta no se repitan.