El senador Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva del Senado, ha vuelto a encender la controversia al justificar el uso de “acordeones” para orientar el voto en la próxima elección judicial del 1 de junio. En un evento reciente, el morenista comparó el uso de listas proporcionadas por terceros con copiar en un examen, asegurando que él mismo utilizará un “acordeón propio” para emitir su voto.
La declaración de Noroña ha generado críticas, ya que el Instituto Nacional Electoral (INE) prohibió explícitamente el uso de materiales que influyan en el voto, como listas o “acordeones” ajenos. Sin embargo, el senador defendió su postura, argumentando que los ciudadanos deben tener libertad para decidir cómo informarse y elegir a los más de tres mil candidatos a jueces, magistrados y ministros.
Fernández Noroña insistió en que preparar un “acordeón propio” es un ejercicio válido para enfrentar la complejidad de la elección judicial, donde los votantes deben analizar perfiles y propuestas de miles de aspirantes. Según el legislador, esta práctica no viola la normativa electoral, ya que se trata de una herramienta personal para recordar preferencias.
La controversia se intensifica porque Noroña, como figura clave de Morena, parece desafiar las reglas establecidas por el INE. Sus declaraciones han sido interpretadas como un intento de legitimar prácticas que podrían comprometer la transparencia del proceso electoral, especialmente en un contexto donde la elección judicial ya enfrenta cuestionamientos.
El senador también aprovechó para minimizar las críticas, afirmando que los ciudadanos deben asumir la responsabilidad de informarse. Comparó el proceso de elegir candidatos con “hacer el amor por primera vez”, una analogía que ha sido calificada como frívola y fuera de lugar por algunos analistas y opositores.
Este no es el primer escándalo en el que Noroña se ve envuelto. Su historial incluye enfrentamientos con estudiantes, críticas por minimizar casos de violencia y desapariciones, y cuestionamientos por el uso de recursos públicos en viajes y publicaciones. Estas controversias alimentan las dudas sobre su liderazgo en el Senado.
La elección judicial, un ejercicio inédito en México, busca renovar el Poder Judicial mediante el voto popular, pero ha sido criticada por su complejidad y falta de claridad en los procesos de selección de candidatos. Las palabras de Noroña solo añaden más leña al fuego en un debate ya polarizado.
Mientras el INE insiste en garantizar un proceso limpio, las declaraciones del senador morenista podrían avivar las tensiones entre los defensores de la reforma judicial y quienes la ven como una maniobra para consolidar el control político. La jornada del 1 de junio será clave para medir el impacto de estas posturas.
Las críticas a Noroña también se centran en su aparente contradicción: mientras defiende la democracia participativa, sus comentarios sugieren una actitud permisiva hacia prácticas que podrían distorsionar la voluntad popular. Esto ha generado un nuevo capítulo de controversia en su trayectoria política.
A pocos días de la elección, las palabras de Fernández Noroña resuenan como un desafío a las autoridades electorales y a los ciudadanos que buscan un proceso transparente. El debate sobre los “acordeones” apenas comienza, y su impacto en la jornada electoral aún está por verse.