La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico ha lanzado una advertencia contundente: los excedentes de acero a nivel mundial se agravarán en los próximos dos años, y China es el principal responsable. Este país, que ya produce más de la mitad del acero global, está desestabilizando el mercado con sus políticas de subvenciones masivas, según un informe reciente.
El problema radica en las enormes cantidades de acero que China produce, superando con creces su demanda interna. En 2024, la capacidad de producción china alcanzó más de mil millones de toneladas, de un total mundial de cerca de dos mil millones. Esto ha generado un exceso que, para 2027, podría llegar a 721 millones de toneladas, un volumen superior a toda la producción de los países de la OCDE juntos.
Las subvenciones chinas, que incluyen préstamos a bajo interés, precios de energía reducidos y beneficios fiscales, son hasta diez veces mayores que las de los países desarrollados. Estas prácticas, según la OCDE, distorsionan la competencia y afectan no solo a la industria del acero, sino también a sectores como la automoción y la maquinaria, que enfrentan una competencia desleal.
El informe señala que el exceso de acero chino, exportado a precios muy bajos, ha causado cierres de plantas siderúrgicas en países como Chile, donde la empresa Huachipato tuvo que suspender operaciones. Otros países, como México y Brasil, también sienten los efectos, especialmente tras los aranceles impuestos por Estados Unidos para proteger su mercado.
La OCDE calcula que la capacidad de producción global de acero crecerá un 6.7 por ciento entre 2025 y 2027, con Asia, liderada por China, aportando el 58 por ciento de este aumento. Sin embargo, la demanda no seguirá este ritmo, creciendo apenas un 0.7 por ciento anual hasta 2030, lo que agravará aún más los excedentes.
Además, estas prácticas no solo afectan la economía, sino también el medio ambiente. La industria del acero genera alrededor del 8 por ciento de las emisiones globales de dióxido de carbono. Las subvenciones chinas dificultan los esfuerzos por descarbonizar el sector, ya que incentivan mantener plantas ineficientes en operación.
La OCDE urge a los gobiernos y a la industria a cooperar para corregir estas distorsiones. Propone eliminar subsidios que alteren el mercado, aumentar la transparencia y fomentar inversiones en tecnologías más limpias para garantizar la sostenibilidad del sector.
En América Latina, la situación es preocupante. Países como México, que exportó acero por 13 mil 383 millones de dólares en 2024, enfrentan aranceles estadounidenses del 25 por ciento, lo que podría desalentar inversiones en la región. Brasil, otro gran productor, también ve amenazada su industria por la competencia china.
La organización también destaca que India, aunque en menor medida, contribuye al problema con sus propias subvenciones. Sin embargo, el foco principal sigue siendo China, cuya influencia en el mercado global del acero no parece disminuir.
La advertencia de la OCDE subraya la necesidad de acciones coordinadas a nivel internacional para evitar que la sobrecapacidad de acero siga perjudicando la economía global y retrasando los avances hacia un futuro más sostenible.

Imagen generada por IA con fines informativos o representativos. Digital Plural se deslinda de cualquier uso o interpretación.
La OCDE alerta: China inunda el mundo con acero y amenaza la economía global
Compartir: