El grupo palestino Hamas ha confirmado que aceptó una nueva propuesta de alto al fuego en la Franja de Gaza, presentada por mediadores de Estados Unidos, Egipto y Qatar. La iniciativa busca poner fin a meses de conflicto y facilitar la liberación de rehenes. Según fuentes cercanas a las negociaciones, Hamas comunicó su decisión al enviado estadounidense Steve Witkoff, quien ha estado trabajando en las tratativas.
La propuesta incluye un plan de tres fases, comenzando con una tregua de seis semanas. Durante este periodo, se espera la liberación gradual de 33 rehenes israelíes, principalmente mujeres, niños, ancianos y personas heridas, a cambio de la excarcelación de cientos de prisioneros palestinos. Además, se permitiría el ingreso de ayuda humanitaria a Gaza para aliviar la crisis en la región.
En la segunda fase, aún en negociación, se buscaría establecer un alto al fuego permanente. Esto incluiría la liberación de los rehenes restantes, tanto civiles como militares, y una retirada completa de las fuerzas israelíes de Gaza. Sin embargo, las discusiones sobre esta etapa son complejas y no hay garantías escritas de que el cese de hostilidades continúe.
La tercera fase contempla la devolución de los cuerpos de rehenes fallecidos y el inicio de un plan de reconstrucción de Gaza, supervisado por organismos internacionales. Este proceso, que podría extenderse entre tres y cinco años, busca abordar la devastación causada por el conflicto en la región.
Israel, por su parte, aún no ha dado una respuesta oficial a la propuesta aceptada por Hamas. Un funcionario israelí indicó que el gobierno está revisando los detalles, pero la decisión final debe ser aprobada por el gabinete de seguridad. Las negociaciones han enfrentado múltiples obstáculos, con Hamas acusando a Israel de rechazar acuerdos previos o iniciar operaciones militares tras aceptaciones.
El conflicto en Gaza, desencadenado por el ataque de Hamas el 7 de octubre de 2023, ha dejado un saldo devastador. Según el Ministerio de Salud de Gaza, más de 54,000 palestinos han muerto y 123,000 han resultado heridos. En Israel, el ataque inicial causó 1,200 muertos y el secuestro de 251 personas, de las cuales 96 permanecen en Gaza, con al menos 34 confirmados como fallecidos.
La comunidad internacional ha intensificado la presión para alcanzar un acuerdo antes de la toma de posesión del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump. Mediadores como Qatar han señalado que ambas partes están más cerca que nunca de un entendimiento, pero las tensiones persisten, especialmente por el control de zonas estratégicas como el Corredor de Filadelfi.
A pesar del optimismo, los combates no han cesado. Ataques recientes en Gaza han causado decenas de víctimas, incluyendo mujeres y niños, mientras que milicias palestinas han respondido con cohetes hacia Israel. La situación humanitaria en Gaza sigue siendo crítica, con cientos de miles de desplazados viviendo en condiciones precarias.
La propuesta también enfrenta críticas internas en Israel. Algunos miembros del gobierno de Benjamin Netanyahu, como el ministro de Finanzas Bezalel Smotrich, han amenazado con abandonar la coalición si se hacen concesiones que consideren contrarias a los objetivos de seguridad del país. Hamas, por su lado, insiste en la necesidad de un alto al fuego permanente y la retirada total de las tropas israelíes.
El desenlace de estas negociaciones será crucial para el futuro de Gaza y la región. Mientras Hamas espera la respuesta de Israel, la comunidad internacional observa con atención, consciente de que un acuerdo podría marcar un punto de inflexión en un conflicto que ha generado enormes pérdidas humanas y materiales.