En un hecho que ha conmocionado a la ciudad de Chihuahua, la pequeña Yasmín Contreras León, de apenas cinco meses de edad, ha sido reportada como desaparecida. La menor fue vista por última vez el pasado 25 de mayo en la ciudad de Cuauhtémoc, según informaron las autoridades locales. Este caso ha generado una profunda preocupación entre los habitantes de la región, quienes exigen respuestas inmediatas.
La desaparición ocurrió en circunstancias que aún no han sido esclarecidas por completo. La familia de Yasmín, visiblemente afectada, ha compartido que la bebé se encontraba bajo el cuidado de un familiar cercano cuando, de manera inexplicable, se perdió todo rastro de ella. La noticia ha sacudido a la comunidad, que no puede comprender cómo una menor tan vulnerable pudo desaparecer sin dejar pistas.
La Fiscalía General del Estado de Chihuahua activó de inmediato la Alerta Amber para facilitar la búsqueda de Yasmín. Según el reporte oficial, la bebé tiene cabello corto y oscuro, ojos cafés, y al momento de su desaparición vestía un mameluco rosa. Las autoridades han difundido esta descripción con la esperanza de que la ciudadanía pueda proporcionar información valiosa para localizarla.
Este caso se suma a una serie de desapariciones que han encendido las alarmas en Chihuahua. En los últimos meses, la entidad ha registrado un preocupante aumento en casos similares, lo que ha llevado a cuestionar la efectividad de las estrategias de seguridad en la región. La ciudadanía expresa su frustración ante la aparente falta de acción para prevenir estas tragedias.
Organizaciones civiles y colectivos de búsqueda han levantado la voz, exigiendo mayor coordinación entre las autoridades estatales y federales. La desaparición de una bebé tan pequeña pone en evidencia las fallas en el sistema de protección a menores, un tema que ha sido recurrente en las discusiones públicas. Los habitantes de Cuauhtémoc se han unido en un esfuerzo colectivo para difundir la imagen de Yasmín.
La familia de la menor ha hecho un llamado desesperado a la población para que cualquier dato, por mínimo que parezca, sea reportado a las autoridades. La incertidumbre y el dolor que atraviesan no hacen más que reflejar el temor de una sociedad que se siente vulnerable ante la creciente ola de inseguridad.
Las autoridades han prometido no descansar hasta dar con el paradero de Yasmín Contreras León. Equipos especializados de la Fiscalía, junto con elementos de seguridad, están llevando a cabo operativos en la zona de Cuauhtémoc y sus alrededores. Sin embargo, el tiempo es un factor crítico en casos como este, y cada hora que pasa incrementa la angustia.
La comunidad de Chihuahua se mantiene en vilo, con la esperanza de que Yasmín regrese pronto a los brazos de su familia. Este caso, doloroso y alarmante, es un recordatorio de la urgencia de fortalecer las medidas de seguridad y protección para los más vulnerables. La sociedad exige justicia y resultados concretos.