En Chihuahua, la elección judicial del 1 de junio de 2025 sigue dando de qué hablar, y no precisamente por buenas razones. Un nuevo caso pone en el ojo del huracán a un aspirante a juez cuyo historial está lejos de ser impecable. Se trata de un candidato cuya trayectoria está marcada por decisiones controversiales y cuestionamientos éticos que han encendido las alarmas entre la ciudadanía.
El candidato en cuestión, cuyo nombre ha sido mencionado en círculos locales, ha sido señalado por presuntas irregularidades durante su carrera. Según fuentes cercanas, este aspirante tiene antecedentes que incluyen fallos judiciales cuestionables, los cuales han generado críticas por parte de organizaciones civiles y colectivos que exigen transparencia en el proceso de selección de jueces.
Uno de los puntos más graves es su supuesta falta de perspectiva de género en casos sensibles. Organizaciones feministas han denunciado que, en el pasado, este candidato mostró un manejo inadecuado en casos relacionados con violencia contra mujeres, lo que ha generado indignación y desconfianza en su capacidad para ocupar un cargo tan delicado como el de juez.
Además, se le relaciona con decisiones que, según críticos, favorecieron a personas con vínculos políticos, lo que pone en tela de juicio su imparcialidad. En un estado como Chihuahua, donde la ciudadanía espera un Poder Judicial renovado y libre de influencias, estos señalamientos son un golpe directo a la credibilidad del proceso electoral judicial.
La elección de jueces por voto popular, una novedad en México, prometía ser un paso hacia la democratización de la justicia. Sin embargo, casos como este alimentan el escepticismo de los votantes. Según datos de plataformas locales, apenas un 5% de los electores en Chihuahua planea participar en esta elección, reflejo del desencanto generalizado.
Organizaciones como Observador Judicial han advertido que muchos candidatos no cumplen con los estándares necesarios para ocupar estos cargos. En el caso de este aspirante, su historial no parece alinearse con los principios de profesionalismo y ética que debería tener un juez, lo que ha generado un debate intenso en redes sociales.
La falta de campañas efectivas y la confusión sobre el proceso electoral no ayudan. Con 13 boletas por elector y un sistema que muchos consideran complicado, la participación ciudadana podría ser aún menor de lo esperado, dejando el camino libre para candidatos cuestionados.
Este caso se suma a una lista de preocupaciones sobre la elección judicial. Mientras algunos defienden la reforma como un avance, otros la ven como un riesgo para la justicia en México. Lo cierto es que, con candidatos como este, la confianza en el proceso se tambalea cada vez más.
La ciudadanía de Chihuahua merece jueces íntegros, capaces de garantizar justicia sin prejuicios. Sin embargo, este candidato, con su “cola que le arrastra”, parece estar lejos de cumplir con esas expectativas. El 1 de junio será un día decisivo para el futuro del Poder Judicial en el estado.

Imagen generada por IA con fines informativos o representativos. Digital Plural se deslinda de cualquier uso o interpretación.
Otro candidato a juez con un pasado que levanta sospechas
Compartir: