El senador Gerardo Fernández Noroña, conocido por su cercanía con Morena, está en el ojo del huracán tras revelarse que destinó 900 mil pesos de la Cámara de Diputados para publicar libros clásicos del comunismo a través de su editorial personal. Este gasto, realizado entre 2020 y 2021, ha desatado críticas por el uso indebido de recursos públicos para fines ideológicos.
Según documentos oficiales, Fernández Noroña, entonces diputado federal, utilizó fondos de la Cámara baja para financiar la impresión de textos de autores como Karl Marx y Friedrich Engels. La editorial, registrada a su nombre, recibió estos recursos bajo el concepto de “apoyo legislativo”, lo que ha generado cuestionamientos sobre la transparencia y legalidad de la operación.
El legislador ha defendido su decisión, argumentando que los libros buscan “promover el pensamiento crítico” y que no hay irregularidades en el uso de los recursos. Sin embargo, críticos señalan que este tipo de gastos no corresponde a las funciones legislativas y acusan a Noroña de aprovechar su posición para impulsar su agenda política personal.
Este no es el primer señalamiento contra Fernández Noroña por el manejo de recursos públicos. En meses recientes, el senador ha sido cuestionado por otros gastos, como un viaje a Europa que costó 159 mil pesos al Senado, donde fue captado viajando en clase preferente, contradiciendo los principios de austeridad que promueve su partido.
La polémica se intensifica porque los 900 mil pesos destinados a la editorial representan una cantidad significativa, especialmente en un contexto donde se pide austeridad a los ciudadanos. Analistas señalan que este tipo de acciones evidencian una falta de rendición de cuentas en el manejo de los fondos públicos.
Organizaciones ciudadanas han exigido una investigación a fondo por parte de la Auditoría Superior de la Federación para esclarecer si hubo desvío de recursos o abuso de poder. Hasta ahora, no se ha anunciado ninguna indagatoria oficial, lo que aumenta la percepción de impunidad en el caso.
Fernández Noroña, por su parte, ha minimizado las críticas, calificándolas como “ataques de la derecha” para desprestigiarlo. Sin embargo, sus declaraciones no han logrado acallar las voces que piden claridad sobre el destino de los recursos y el propósito real de la publicación de estos libros.
El caso ha generado un intenso debate en redes sociales, donde usuarios cuestionan la ética del senador y exigen que se prioricen necesidades más urgentes con el dinero público. La controversia promete seguir dando de qué hablar en los próximos días.