Este viernes 23 de mayo, la Ciudad de México enfrentará un día de contrastes climáticos, con lluvias que podrían complicar la movilidad y temperaturas que mantendrán el ambiente cálido. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) advierte sobre la presencia de canales de baja presión que, combinados con una línea seca en el norte del país, generarán condiciones inestables en la capital.
Durante la mañana, se espera un ambiente templado con temperaturas mínimas de 15 a 17 °C en la mayoría de las alcaldías. Sin embargo, el cielo estará parcialmente nublado, lo que podría dar una falsa sensación de calma antes de que las condiciones cambien.
Hacia la tarde, el panorama se tornará más complicado. El SMN pronostica intervalos de chubascos con acumulados de 5 a 25 mm en la Ciudad de México, acompañados de actividad eléctrica y posible caída de granizo en algunas zonas. Estas condiciones podrían generar encharcamientos y afectar el tráfico en la capital.
En alcaldías como Álvaro Obregón, se espera una temperatura máxima de 25 °C y una mínima de 15 °C. En Gustavo A. Madero, las temperaturas alcanzarán hasta 27 °C, con una mínima de 17 °C. Estas variaciones reflejan el impacto del calor persistente, aunque las lluvias traerán un ligero alivio.
El sábado, las condiciones se intensificarán. El pronóstico indica chubascos con lluvias puntuales fuertes, de 25 a 50 mm, lo que podría aumentar el riesgo de inundaciones en áreas vulnerables. Para el domingo, las lluvias podrían ser aún más intensas, con acumulados de 50 a 75 mm en algunas zonas.
El viento también será un factor a considerar este viernes. Se esperan rachas de 10 a 20 km/h, con picos de hasta 50 km/h, lo que podría generar tolvaneras y reducir la visibilidad en avenidas principales. Las autoridades recomiendan precaución a automovilistas y peatones.
La Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la CDMX ha instado a la población a mantenerse informada sobre las actualizaciones meteorológicas. Las lluvias, combinadas con descargas eléctricas, podrían representar un riesgo en zonas abiertas, especialmente durante la tarde y noche.
A pesar del calor, con máximas que rondarán los 27 a 29 °C, las precipitaciones podrían refrescar el ambiente, aunque también complicar las actividades al aire libre. La capital vive un momento de transición climática, con un fin de semana que promete más lluvias.
Este pronóstico refleja las condiciones típicas de la temporada, donde el calor y las lluvias conviven en la Ciudad de México. Las autoridades han reiterado la importancia de tomar medidas preventivas, como evitar zonas propensas a encharcamientos y estar atentos a los avisos oficiales.