El 22 de mayo de 1980 nació en Japón un personaje que cambiaría la historia del entretenimiento: Pac-Man. Este pequeño círculo amarillo, conocido como el “comecocos”, debutó en los salones arcade y rápidamente conquistó al mundo con su mecánica simple pero adictiva. Cuatro décadas y media después, sigue siendo un símbolo universal de la cultura pop.
Creado por Toru Iwatani para la empresa Namco, Pac-Man surgió de una idea inspirada en una pizza a la que le faltaba una porción. Originalmente llamado “Puck-Man” por el sonido japonés “paku” (abrir y cerrar la boca), su nombre cambió para el mercado occidental. Este detalle curioso refleja la creatividad detrás de un diseño que marcó época.
La mecánica de Pac-Man es sencilla: una bola amarilla recorre un laberinto comiendo puntos mientras esquiva a cuatro fantasmas con personalidades únicas: Blinky, Pinky, Inky y Clyde. Los círculos grandes, o “power pellets”, permiten a Pac-Man volverse temporalmente invencible y devorar a los fantasmas, añadiendo un giro estratégico al juego.
Lo que hace especial a Pac-Man es su algoritmo innovador. Cada fantasma tiene un comportamiento distinto, lo que era revolucionario para la época. Esta inteligencia artificial primitiva, combinada con una jugabilidad accesible, atrajo a millones, incluyendo un público femenino que no era común en los videojuegos de entonces.
En sus primeros siete años, Pac-Man vendió 300,000 máquinas arcade, batiendo récords mundiales de ventas y recaudación. Su impacto trascendió los salones recreativos, apareciendo en consolas, series de televisión, películas como “Pixels” y hasta en un Doodle de Google que acumuló 4.8 millones de horas de juego en 2010.
Bandai Namco, la empresa detrás de Pac-Man, celebra este 45 aniversario con eventos especiales. En colaboración con el OXO Museo del Videojuego, se han organizado exposiciones en Madrid y Málaga, además de la instalación de Pac-Man gigantes en puntos clave de estas ciudades.
El legado de Pac-Man sigue vivo. En julio de 2025, el personaje será protagonista en el videojuego “Shadow Labyrinth” y continuará apareciendo en títulos como “Mario Kart” y “Super Smash Bros”. Su versatilidad lo ha llevado de los arcades a plataformas modernas, demostrando su relevancia.
Con un reconocimiento global del 90%, Pac-Man no solo es un ícono de los videojuegos, sino un fenómeno cultural. Ha inspirado modas, bandas sonoras y hasta un restaurante temático en Chicago, Level 257, en referencia al nivel donde el juego original colapsa.
A 45 años de su creación, Pac-Man sigue siendo una prueba de que las ideas simples, ejecutadas con genialidad, pueden trascender generaciones. Su silueta amarilla sigue siendo sinónimo de diversión y nostalgia para millones de fans en todo el mundo.

Imagen generada por IA con fines informativos o representativos. Digital Plural se deslinda de cualquier uso o interpretación.
¡Pac-Man celebra 45 años como ícono inmortal de los videojuegos!
Compartir: