Una menor de 13 años, reportada como desaparecida en el municipio de Juárez, Nuevo León, fue encontrada con vida, según confirmaron las autoridades locales. La noticia ha generado alivio entre los habitantes de la zona, pero también pone de manifiesto la creciente preocupación por los casos de desapariciones en el estado.
La adolescente fue vista por última vez en la colonia Los Huertos, en Juárez, el pasado 20 de mayo. Su desaparición activó de inmediato los protocolos de búsqueda, incluyendo la Alerta Amber, que movilizó a la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León y a diversas corporaciones policiales.
De acuerdo con información oficial, la menor salió de su domicilio sin dar mayores detalles sobre su destino. Esto desató la angustia de su familia, quienes reportaron el caso a las autoridades y compartieron la información en redes sociales para agilizar su localización.
La Fiscalía Antisecuestros encabezó las labores de búsqueda, coordinándose con otras dependencias para rastrear cualquier indicio del paradero de la menor. Durante dos días, los esfuerzos se intensificaron, con operativos en distintas zonas del municipio y revisiones de cámaras de seguridad.
Finalmente, la menor fue localizada en el municipio de Guadalupe, en buenas condiciones de salud. Las autoridades no proporcionaron detalles específicos sobre cómo fue encontrada, pero confirmaron que no fue víctima de ningún delito, lo que tranquilizó a sus familiares.
Este caso ha reavivado el debate sobre la inseguridad en Nuevo León, donde los reportes de desapariciones, especialmente de menores, han incrementado en los últimos meses. La falta de información clara sobre las circunstancias de estas desapariciones genera incertidumbre en la población.
Organizaciones civiles y colectivos de búsqueda han señalado que las autoridades deben reforzar las medidas preventivas y mejorar la coordinación para atender estos casos con mayor rapidez. La activación de la Alerta Amber, aunque efectiva en esta ocasión, no siempre garantiza resultados inmediatos.
A pesar del desenlace positivo, la comunidad exige mayor transparencia y acciones concretas para evitar que estos incidentes se repitan. La localización de la menor es un alivio, pero el problema de fondo persiste en el estado.
La familia de la adolescente expresó su agradecimiento a quienes colaboraron en la difusión de la ficha de búsqueda. Sin embargo, el caso deja preguntas abiertas sobre las estrategias de seguridad en Juárez y otros municipios de Nuevo León.
La sociedad civil continúa presionando por políticas públicas que aborden de manera integral el problema de las desapariciones, mientras los habitantes de Juárez esperan respuestas y medidas que devuelvan la tranquilidad a sus comunidades.