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Más de 700 animales rescatados encuentran un nuevo hogar en Mazatlán

En un esfuerzo sin precedentes, el Bioparc El Encanto en Mazatlán, Sinaloa, se prepara para recibir a más de 700 animales silvestres provenientes del Ostok Sanctuary en Culiacán. Este traslado masivo responde a la creciente ola de violencia que azota la capital sinaloense, un problema que ha puesto en riesgo la seguridad de los animales y del personal que los cuida.
El Santuario Ostok, conocido por ser el centro de rescate de fauna silvestre más grande de México, ha enfrentado condiciones insostenibles debido a los enfrentamientos armados, bloqueos y amenazas en Culiacán. La situación llegó a un punto crítico, donde los cuidadores y veterinarios no podían garantizar la atención adecuada para los animales, muchos de ellos víctimas previas de abandono, tráfico ilegal o maltrato.
Entre los animales trasladados se encuentran especies tan diversas como elefantes, leones, tigres, jaguares, primates, antílopes y aves exóticas. Este operativo, descrito como una hazaña logística, involucró grúas, tráileres, helicópteros y el esfuerzo de decenas de personas para garantizar el bienestar de los ejemplares durante el viaje de 220 kilómetros hasta Mazatlán.
Bioparc El Encanto, ubicado en un terreno de 300 hectáreas, promete ser más que un refugio. Con una inversión de 1,200 millones de pesos, este proyecto busca consolidarse como el santuario de vida silvestre más importante de Latinoamérica, ofreciendo un hábitat digno y seguro para los animales rescatados, muchos de los cuales han sufrido condiciones de cautiverio o explotación en el pasado.
Raúl Ricardo Villavicencio, director de Encantos Desarrollo, destacó que el bioparque no solo será un espacio de conservación, sino también un atractivo ecoturístico. Se espera que su apertura en agosto de 2025 impulse el turismo en Mazatlán y beneficie a comunidades cercanas como El Quelite, Los Zapotes, La Noria y El Recreo.
La violencia en Culiacán, que ha forzado este éxodo animal, refleja un problema más amplio en Sinaloa. Desde septiembre de 2024, la ciudad ha registrado cierres de negocios, escuelas y centros de salud debido a la inseguridad, afectando la vida diaria de miles de personas y, ahora, también a la fauna rescatada.
El traslado de los animales no estuvo exento de desafíos. Algunos felinos, como leones y tigres, requirieron sedación para facilitar su movilización, mientras que otros, entrenados para entrar en contenedores, viajaron en condiciones controladas. La caravana, que incluyó alrededor de 20 vehículos, fue un espectáculo conmovedor para quienes la presenciaron en la carretera México 15.
Bioparc El Encanto no solo ofrecerá un refugio, sino también programas de educación, capacitación y conservación. Este nuevo hogar permitirá a los animales vivir en un entorno tranquilo, lejos del sonido de los balazos que marcaba su día a día en Culiacán.
A pesar del éxito inicial del traslado, aún quedan pendientes. Catorce felinos rescatados del crimen organizado esperan autorización de las autoridades para unirse al resto de los animales en Mazatlán, lo que subraya la complejidad de proteger a la fauna en un contexto de violencia.
Este movimiento, calificado como un acto de resistencia y amor por la vida silvestre, es un recordatorio de cómo la inseguridad no solo afecta a las personas, sino también a los seres más vulnerables. Bioparc El Encanto se alza como una esperanza para estos animales y un ejemplo de compromiso con la conservación.

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