El pasado 18 de mayo de 2025, el Trolebús Chalco-Santa Marta, una obra impulsada por el gobierno de Morena, inició operaciones conectando el Estado de México con la Ciudad de México. La presidenta Claudia Sheinbaum encabezó la inauguración, destacando la supuesta reducción de tiempos de traslado de dos horas a solo 35 minutos. Sin embargo, la realidad parece ser otra, ya que solo nueve de las 15 estaciones previstas están funcionando.
La Línea 11 del trolebús, que recorre 18.5 kilómetros desde Chalco hasta Santa Martha Acatitla, prometía beneficiar a más de 3 millones de personas. No obstante, las estaciones Los Reyes, La Caldera, Apolocalco, Vicente Guerrero y Chalco Centro permanecen cerradas. Las autoridades atribuyen estas demoras a obras hidráulicas para prevenir inundaciones, pero los retrasos han generado dudas sobre la planeación del proyecto.
El costo del pasaje, establecido en 13 pesos, ha sido otro punto de controversia. Aunque se promociona como un sistema moderno con WiFi y aire acondicionado, los usuarios han señalado que el precio es elevado comparado con otros transportes públicos en la región. Además, el método de pago utiliza la Tarjeta de Movilidad Integrada, lo que podría limitar el acceso para quienes no están familiarizados con este sistema.
La obra, que combina esfuerzos del gobierno federal, el Estado de México y la Ciudad de México, fue presentada como un hito en movilidad eléctrica. Delfina Gómez, gobernadora mexiquense, y Clara Brugada, jefa de gobierno capitalina, acompañaron a Sheinbaum en las pruebas preoperativas. Sin embargo, la falta de transparencia sobre los costos totales del proyecto, estimados en más de 11 mil millones de pesos, ha levantado sospechas.
Otro aspecto cuestionable es la ampliación anunciada hacia Ixtapaluca, que aún no tiene fecha confirmada. Esta promesa se suma a las declaraciones de Daniel Sibaja, secretario de Movilidad del Edomex, quien aseguró que el trolebús ofrecerá gratuidad para adultos mayores y personas con discapacidad. Pero, sin un calendario claro, muchos consideran estas palabras como simples intenciones electoreras.
El trolebús conecta con la Línea A del Metro y la Línea 2 del Cablebús, lo que en teoría facilita la movilidad metropolitana. Sin embargo, la operación parcial de las estaciones ha generado molestias entre los usuarios, quienes esperaban un servicio completo desde el primer día. Las estaciones abiertas incluyen Santa Martha, Tejones, Amalinalco, J. María Martínez y Parque de la Mujer, entre otras.
Durante la construcción, se generaron alrededor de 7 mil empleos, según el gobierno mexiquense. Aunque este dato se ha destacado como un logro, no compensa las expectativas incumplidas de una obra que lleva años en desarrollo. Los retrasos, atribuidos inicialmente al hallazgo de una tubería de drenaje, reflejan una falta de previsión que afecta directamente a los ciudadanos.
La narrativa oficial insiste en que el trolebús es un sistema innovador y ecológico, pero la ciudadanía exige resultados concretos. Con solo nueve estaciones operativas y un costo elevado, el proyecto parece más una herramienta de propaganda que una solución real para los problemas de movilidad en la zona oriente del Estado de México.
Mientras el gobierno de Morena celebra este “avance”, los habitantes de Chalco, Valle de Chalco y La Paz siguen esperando un transporte que cumpla con las promesas. La pregunta sigue en el aire: ¿es el Trolebús Chalco-Santa Marta un verdadero cambio o solo otra obra a medias del actual régimen?

Imagen generada por IA con fines informativos o representativos. Digital Plural se deslinda de cualquier uso o interpretación.
Trolebús Chalco-Santa Marta: ¿Avance o promesa rota del gobierno?
Compartir: