El expresidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha sido diagnosticado con una forma agresiva de cáncer de próstata, según un comunicado oficial emitido por su oficina el pasado domingo. A sus 82 años, el político demócrata enfrenta un nuevo desafío de salud que ha conmocionado al ámbito político y público.
La noticia se dio a conocer tras un examen médico realizado la semana pasada, cuando Biden reportó un aumento en síntomas urinarios. Durante la revisión, los médicos detectaron un nódulo prostático que requería evaluación adicional. Las pruebas posteriores confirmaron el diagnóstico el viernes, revelando un cáncer con una puntuación de Gleason de 9, clasificado como Grupo de Grado 5.
Este tipo de cáncer es considerado altamente agresivo, y los informes médicos indican que ya ha metastatizado a los huesos. A pesar de la gravedad del diagnóstico, el comunicado señala que el tumor es sensible a las hormonas, lo que abre la puerta a opciones de tratamiento más efectivas.
Biden y su familia están evaluando las alternativas de tratamiento junto a su equipo médico. Por el momento, no se han proporcionado detalles adicionales sobre los pasos a seguir o el pronóstico, pero el expresidente parece decidido a enfrentar esta batalla con determinación.
El diagnóstico llega en un momento en que la salud de Biden ha estado bajo escrutinio. Durante su presidencia, que concluyó en enero de 2025, su edad y capacidad física fueron objeto de debate constante. Este nuevo episodio médico reaviva las discusiones sobre su historial de salud, que incluye intervenciones previas por problemas dermatológicos y una lesión cancerosa extirpada en 2023.
El cáncer de próstata es una de las formas de cáncer más comunes en hombres mayores de 65 años. A la edad de Biden, las probabilidades de desarrollar esta enfermedad aumentan significativamente. La detección temprana y los avances en tratamientos hormonales ofrecen esperanza, pero la metástasis ósea complica el panorama.
La noticia ha generado reacciones en el ámbito internacional, con mensajes de apoyo y preocupación por parte de líderes políticos y ciudadanos. La trayectoria de Biden, marcada por su mandato como el presidente de mayor edad en la historia de Estados Unidos, agrega un peso adicional a este anuncio.
Mientras Biden y sus seres queridos enfrentan esta difícil situación, el mundo observa con atención los próximos pasos del expresidente. Su lucha contra el cáncer será, sin duda, un capítulo más en una carrera política llena de retos y momentos definitorios.