En un partido que mantuvo a los aficionados al borde de sus asientos, el Inter de Milán y la Lazio protagonizaron un empate 2-2 en la jornada 37 de la Serie A, disputado en el icónico estadio Giuseppe Meazza. Este resultado deja al Inter en una posición complicada en su lucha por el liderato del fútbol italiano.
El encuentro comenzó con un Inter dominante, que logró abrir el marcador justo antes del descanso. Yann Bisseck aprovechó un rebote en un tiro de esquina para cabecear el balón al fondo de la red, poniendo el 1-0 a los 47 minutos. Los neroazzurri se fueron al vestuario con la ventaja y el control del juego.
La Lazio, sin embargo, no se rindió. En la zweite mitad, el equipo romano mostró su garra con la entrada de Pedro Rodríguez desde el banquillo. El español empató el marcador al minuto 72, tras una asistencia de Matías Vecino, desatando la euforia entre los aficionados visitantes.
El Inter respondió con fuerza. Al minuto 79, Hakan Çalhanoglu cobró un tiro libre con precisión, enviando un centro que Denzel Dumfries remató de cabeza para devolverle la ventaja a los locales. El 2-1 parecía encaminar al Inter hacia la victoria y, con ella, al liderato provisional de la Serie A.
Pero la Lazio tenía otros planes. En el minuto 90, una jugada polémica dentro del área del Inter derivó en un penalti a favor de los biancocelesti. Pedro Rodríguez, con sangre fría, convirtió la pena máxima y selló su doblete, igualando el marcador 2-2 en un final de alarido.
El drama no terminó ahí. En los minutos de compensación, Marko Arnautovic tuvo en sus botas la oportunidad de darle el triunfo al Inter, pero su remate se fue desviado por centímetros. Poco después, un gol suyo fue anulado por fuera de juego, dejando a los neroazzurri con un sabor amargo.
Este empate complica las aspiraciones del Inter, que se mantiene en la segunda posición de la tabla, pero ahora depende de otros resultados para alcanzar el liderato en la última jornada. La Lazio, por su parte, se aferra a su lugar en la zona de clasificación a competencias europeas.
El Giuseppe Meazza fue testigo de un choque de titanes, con ambos equipos dejando todo en la cancha. La lucha por el Scudetto y los puestos de Champions League promete un cierre de temporada electrizante en la Serie A.