Un incendio de proporciones alarmantes consumió varios vehículos en el corralón de la Fiscalía Zona Norte en Ciudad Juárez, Chihuahua, dejando tras de sí una estela de destrucción y preocupación. El siniestro, ocurrido esta tarde en el kilómetro 23 de la Carretera Panamericana, ha desatado todo tipo de especulaciones sobre su origen.
Fuentes cercanas a la investigación señalan que el fuego pudo haber sido provocado intencionalmente por un ex empleado de la Fiscalía. Esta teoría ha encendido las alertas, pues apunta a un posible acto de venganza o sabotaje en una instalación clave para las autoridades estatales.
El corralón, destinado a resguardar vehículos relacionados con investigaciones judiciales, se vio envuelto en llamas que alcanzaron al menos media docena de automóviles, los cuales quedaron reducidos a chatarra. Las imágenes del lugar muestran columnas de humo negro elevándose al cielo, visibles desde varios puntos de la ciudad.
Elementos del Departamento de Bomberos acudieron de inmediato al lugar, desplegando la máquina extintora 10 y una cisterna para combatir el fuego. Su rápida intervención evitó que las llamas se propagaran a más áreas del corralón, aunque los daños ya eran considerables.
La ciudadanía de Ciudad Juárez, acostumbrada a lidiar con la inseguridad, ve con preocupación este nuevo incidente. Un ataque directo a una instalación de la Fiscalía no solo pone en riesgo evidencia clave, sino que también evidencia la vulnerabilidad de las instituciones ante actos delictivos.
Las autoridades no han emitido un comunicado oficial sobre el responsable o las motivaciones detrás del incendio. Sin embargo, la hipótesis de que un ex empleado esté involucrado ha generado críticas hacia los protocolos de seguridad y supervisión en la Fiscalía.
Este incidente se suma a una serie de eventos violentos que han sacudido a Chihuahua en los últimos meses, desde enfrentamientos armados hasta incendios forestales que han devastado miles de hectáreas. La sensación de descontrol crece entre los habitantes, quienes exigen respuestas claras.
La Fiscalía Zona Norte ha prometido una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y determinar si hubo negligencia o complicidad interna. Mientras tanto, el corralón permanece bajo resguardo, con daños que aún no han sido cuantificados.
El incendio no solo representa una pérdida material, sino también un golpe a la confianza en las instituciones encargadas de garantizar la seguridad en Ciudad Juárez. La ciudadanía espera que este caso no quede en la impunidad, como tantos otros.
En un contexto donde la violencia y la inseguridad parecen no dar tregua, este nuevo episodio enciende las alarmas sobre la capacidad del gobierno para proteger sus propios activos y, más importante aún, a sus ciudadanos.