El gobierno del Estado de México, encabezado por Morena, presume sus programas sociales como un gran logro para las mujeres mexiquenses. Entre ellos, Mujeres con Bienestar y Alimentación para el Bienestar prometen aliviar las carencias de miles de familias. Pero, ¿realmente estos apoyos llegan a quienes más los necesitan, o son solo una estrategia para ganar votos?
Mujeres con Bienestar ofrece un apoyo económico de 2,500 pesos bimestrales a mujeres de 18 a 62 años que viven en condiciones de pobreza. Además, incluye servicios como atención médica, psicológica y educativa. Sin embargo, las beneficiarias reportan que los procesos de inscripción son complicados y que, en muchos casos, los apoyos no llegan a tiempo.
Por su parte, Alimentación para el Bienestar entrega despensas gratuitas cada dos meses a mujeres de 50 a 64 años en situación de pobreza. Estas canastas contienen productos básicos como frijol, arroz y aceite, pero algunas beneficiarias señalan que la calidad y cantidad de los alimentos no siempre son suficientes para cubrir las necesidades de sus familias.
El registro para ambos programas es un dolor de cabeza para muchas. Las interesadas deben llenar formularios en línea, presentar documentos como CURP, identificación oficial y comprobantes de domicilio, y acudir a módulos presenciales. Para las mujeres que viven en zonas marginadas, este trámite representa un gasto adicional que no todas pueden costear.
La Secretaría de Bienestar del Edomex asegura que en 2025 se beneficiarán más de 650 mil mujeres con estos programas. Sin embargo, las cifras oficiales contrastan con las quejas de quienes aseguran haber sido excluidas sin explicación o enfrentan retrasos en los depósitos y entregas de despensas.
Otro punto crítico es la permanencia en los programas. Las beneficiarias de 2024 deben reinscribirse entre el 14 y el 20 de mayo de 2025, presentando nuevamente documentación. Si por alguna razón no pueden acudir, como problemas de salud, deben enviar un representante con una carta poder y un certificado médico. Este requisito ha sido señalado como una barrera para las mujeres más vulnerables.
Mientras el gobierno de Delfina Gómez presume que estos programas son un pilar para las familias mexiquenses, las historias de beneficiarias reflejan una realidad distinta. Muchas enfrentan trabas burocráticas y sienten que los apoyos, aunque útiles, no resuelven de fondo los problemas de pobreza e inseguridad alimentaria.
La pregunta sigue en el aire: ¿son estos programas una solución real o solo una herramienta política para mantener contenta a la base electoral? Lo cierto es que, mientras