En un nuevo capítulo de tensiones políticas en Hidalgo del Parral, el alcalde Salvador Calderón ha salido a exigir una disculpa pública a un regidor del partido Movimiento Ciudadano. El motivo: un presunto intento de boicotear el festejo del Día de las Madres, organizado por el Ayuntamiento. Según el edil, el regidor y un grupo de personas en estado de ebriedad buscaron arruinar el evento, generando molestias entre los asistentes.
El incidente ocurrió durante una celebración dedicada a las madres de Parral, un evento que buscaba unir a la comunidad. Sin embargo, la presencia del regidor, acompañado por 12 individuos, entre ellos un supuesto delincuente conocido como “El Pimpón”, desató la controversia. Calderón aseguró que los involucrados llegaron en un estado inconveniente, causando disturbios y profiriendo amenazas.
El alcalde no dudó en calificar las acciones como una falta de respeto hacia los ciudadanos que disfrutaban del festejo. En sus declaraciones, señaló que el regidor debe asumir la responsabilidad de sus actos y ofrecer una disculpa pública. “Es lo menos que puede hacer por quienes estaban en el evento”, afirmó Calderón, visiblemente indignado por lo sucedido.
A pesar de la gravedad de las acusaciones, el regidor no fue detenido ni consignado por las autoridades locales. Según el alcalde, esta decisión se tomó considerando su posición como miembro del Ayuntamiento. Sin embargo, Calderón dejó claro que no tolerará este tipo de comportamientos, especialmente cuando afectan eventos organizados para la comunidad.
Las críticas del alcalde también apuntaron a las motivaciones detrás del incidente. Sugirió que el intento de sabotaje podría estar ligado a diferencias partidistas, ya que el regidor pertenece a un partido distinto al del gobierno municipal. Este señalamiento ha avivado el debate sobre la polarización política en Parral.
El caso ha generado opiniones divididas entre los habitantes de la localidad. Mientras algunos respaldan la postura del alcalde y exigen consecuencias, otros consideran que la situación debe manejarse con mayor prudencia para evitar escalar el conflicto. Hasta el momento, el regidor involucrado no ha emitido comentarios al respecto.
Se buscó la versión del regidor para conocer su perspectiva, pero evadió a los medios de comunicación. Esta falta de respuesta ha alimentado las especulaciones sobre su papel en los hechos y su relación con los individuos que lo acompañaban durante el evento.
La controversia pone en el centro de la discusión la conducta de los representantes políticos en Parral. Los ciudadanos esperan que las autoridades manejen el asunto con transparencia y que se tomen medidas para garantizar que eventos similares no se repitan en el futuro.