En un evento que reunió a más de 200 productores nacionales y 100 compradores internacionales, la industria textil mexicana logró acuerdos comerciales por 55 millones de dólares. La Secretaría de Economía, encabezada por Marcelo Ebrard, fue la encargada de organizar esta rueda de negocios en la Ciudad de México, con un objetivo claro: impulsar un sector clave para el país.
El encuentro, bautizado como “Conectando a la Industria Textil Mexicana con el Mundo”, se centró en fortalecer las cadenas de suministro y promover productos hechos en México. Este esfuerzo busca no solo aumentar la competitividad, sino también combatir problemas como la piratería y el contrabando, que han golpeado duramente al sector textil durante años.
Uno de los logros más destacados fue la compra de 5 millones de dólares por parte de la reconocida marca Michael Kors. Este acuerdo, anunciado durante las sesiones B2B, refleja el potencial de la industria mexicana para atraer a grandes jugadores internacionales y consolidarse en el mercado global.
Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Economía, subrayó la importancia histórica de la industria textil en México. Recordó que este sector fue uno de los pilares de la industrialización del país, y eventos como este son clave para recuperar su brillo y competitividad en un mundo cada vez más exigente.
Por su parte, Rafael Zaga Saba, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Textil, destacó la colaboración entre el sector público y privado. Según Zaga, esta alianza es fundamental para posicionar a México como un proveedor confiable en los mercados globales, especialmente en Estados Unidos, gracias a las ventajas del T-MEC.
El evento también sirvió para resaltar la calidad y capacidad de adaptación de las empresas mexicanas. Compañías como Global Denim, líder en la fabricación de mezclilla, demostraron por qué México sigue siendo un referente en la producción textil, a pesar de la fuerte competencia internacional.
La Secretaría de Economía señaló que se realizaron más de 2,500 reuniones de negocios durante el encuentro. Estas interacciones no solo generaron acuerdos millonarios, sino que también abrieron la puerta a futuras colaboraciones que podrían transformar el panorama del sector.
A pesar de los retos, como la competencia desleal y el contrabando, la industria textil mexicana muestra signos de fortaleza. Este tipo de iniciativas refleja un esfuerzo por recuperar el terreno perdido y apostar por un futuro donde lo “Hecho en México” sea sinónimo de calidad y confianza.
El impacto de estos acuerdos va más allá de los números. Se espera que fortalezcan el empleo, impulsen la inversión y refuercen la identidad de una industria que combina tradición con innovación para competir en el escenario global.