La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su profundo dolor por la muerte de José “Pepe” Mujica, el icónico expresidente de Uruguay que marcó la historia de la izquierda latinoamericana. En un mensaje compartido en redes sociales, Sheinbaum no escatimó en halagos para el líder uruguayo, destacando su “sabiduría, pensamiento y sencillez” como un ejemplo para el mundo. Pero, ¿qué hay detrás de este homenaje?
Mujica, fallecido a los 89 años en Montevideo, dejó un legado imborrable tras su presidencia entre 2010 y 2015. Su vida austera, viviendo en una modesta chacra y donando gran parte de su salario, lo convirtió en un símbolo de humildad. Sheinbaum, fiel a su estilo, aprovechó la ocasión para resaltar la conexión de Mujica con los ideales progresistas que ella misma defiende. ¿Coincidencia o estrategia política?
El exmandatario uruguayo enfrentó una dura batalla contra un cáncer de esófago, diagnosticado en 2024, que eventualmente se extendió al hígado. En enero de 2025, Mujica anunció que no continuaría con tratamientos, buscando despedirse en paz. Su esposa, Lucía Topolansky, confirmó que en sus últimos días recibió cuidados paliativos. La noticia de su muerte conmocionó a líderes de toda América Latina.
Sheinbaum, desde Palacio Nacional, no solo lamentó la pérdida, sino que extendió condolencias a la familia de Mujica, sus amigos y el pueblo uruguayo. En su mensaje, incluyó una fotografía donde aparece saludando al exmandatario, un guiño a la cercanía que ambos compartieron en eventos como la toma de posesión de Andrés Manuel López Obrador en 2018, donde Mujica fue un invitado destacado.
El impacto de Mujica trascendió fronteras. Líderes como Gustavo Petro de Colombia lo despidieron como un “gran revolucionario”, mientras que Evo Morales de Bolivia lo llamó un “hermano” y defensor de la integración regional. Incluso desde España, figuras como Irene Montero recordaron sus frases célebres sobre la lucha por un mundo más justo. ¿Podrá Sheinbaum capitalizar este momento de unidad latinoamericana?
La trayectoria de Mujica no estuvo exenta de controversias. En su juventud, formó parte del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, una guerrilla que enfrentó a la dictadura militar uruguaya, lo que le costó 13 años de prisión en condiciones extremas. Sin embargo, su transformación en un líder político pragmático y su defensa de leyes progresistas, como la legalización de la marihuana, lo convirtieron en un referente global.
En México, Mujica siempre expresó admiración. “Yo me siento amigo de México”, declaró en varias ocasiones, y su presencia en eventos clave, como el desfile de la Independencia en 2022, reforzó esa conexión. Sheinbaum, consciente de esta relación, no dudó en destacar el papel de Mujica como inspiración para los movimientos de izquierda en la región.
Mientras el mundo despide a Pepe Mujica, su legado sigue resonando. Desde su rechazo al consumismo hasta su compromiso con la justicia social, el “presidente más humilde del mundo” deja una huella difícil de igualar. En México, la voz de Sheinbaum se suma al coro de tributos, pero también plantea preguntas sobre cómo su gobierno buscará emular o al menos evocar el espíritu de figuras como Mujica.

Imagen generada por IA con fines informativos o representativos. Digital Plural se deslinda de cualquier uso o interpretación.
¡Luto en América Latina! Claudia Sheinbaum despide a Pepe Mujica con emotivo mensaje
Compartir: