En un nuevo episodio de brutalidad, dos hombres fueron encontrados sin vida en la entrada de Guadalupe y Calvo, Chihuahua, este domingo. Las víctimas, identificadas como Isidro Ayala Muni y Rey David Vega Molina, fueron asesinadas con extrema violencia, dejando un mensaje claro de la inseguridad que azota la región.
Isidro Ayala, de 32 años, y Rey David Vega, de 30, eran originarios de esta localidad. Según información extraoficial, ninguno tenía antecedentes penales, lo que agrava la percepción de que nadie está a salvo en esta zona. La noticia ha generado conmoción entre los habitantes, quienes ven cómo la violencia se normaliza.
El crimen fue particularmente cruento: uno de los hombres fue asesinado a navajazos, mientras que el otro recibió disparos. Los cuerpos fueron abandonados en el arco de entrada al municipio, un lugar que, lejos de dar la bienvenida, se ha convertido en escenario recurrente de atrocidades.
Este no es un caso aislado. Guadalupe y Calvo ha sido testigo de múltiples ejecuciones en los últimos meses, muchas vinculadas a la disputa entre grupos criminales. La región, marcada por su ubicación estratégica, sigue siendo un punto caliente en la lucha por el control delictivo.
Las autoridades locales y estatales han sido señaladas por su incapacidad para frenar esta ola de violencia. A pesar de los operativos, los asesinatos continúan, y la población vive con miedo constante. La presencia de cárteles en la zona es un secreto a voces, pero las acciones para desmantelarlos parecen insuficientes.
La Fiscalía General del Estado ha iniciado una investigación, pero los detalles son escasos. Hasta ahora, no hay detenidos ni avances significativos que ofrezcan esperanza a los habitantes de Guadalupe y Calvo. La impunidad sigue siendo la norma en casos como este.
La comunidad, por su parte, exige respuestas. Los nombres de Isidro y Rey David se suman a una lista cada vez más larga de víctimas en un estado donde la seguridad es una promesa incumplida. Los ciudadanos se preguntan cuánto más tendrán que soportar antes de ver un cambio real.
Este trágico suceso pone en evidencia, una vez más, el abandono de las autoridades frente a la creciente inseguridad. Mientras los responsables siguen libres, la incertidumbre y el temor se apoderan de Chihuahua, dejando claro que la paz está lejos de ser una realidad.

Imagen generada por IA con fines informativos o representativos. Digital Plural se deslinda de cualquier uso o interpretación.
Dos hombres ejecutados en Guadalupe y Calvo: la violencia no da tregua en Chihuahua
Compartir: