La gobernadora de Chihuahua, Maru Campos, felicitó al secretario general de Gobierno, Santiago de la Peña, por el arranque del sistema JuárezBus en Ciudad Juárez. Este proyecto, que promete modernizar el transporte público en la frontera, ha sido presentado como un gran avance para los juarenses. Sin embargo, no todo es tan claro como parece.
El JuárezBus, con sus tres líneas operativas, incluye la reciente inauguración de la línea BRT-1, que cuenta con 40 nuevos camiones y 34 estaciones. Según Campos, este sistema responde a una promesa de campaña para mejorar la movilidad en una de las ciudades más importantes del estado. Pero, ¿realmente cumple con las expectativas de la ciudadanía?
Santiago de la Peña, figura clave en el proyecto, supervisó personalmente las unidades y las instalaciones del sistema. Desde los patios de resguardo hasta las oficinas de la Operadora de Transporte, el funcionario aseguró que todo está listo para operar. No obstante, algunos ciudadanos cuestionan si la infraestructura estará a la altura de las necesidades diarias.
La inversión en el JuárezBus ha sido significativa, con recursos destinados a autobuses modernos y estaciones renovadas. El gobierno estatal destaca que Ciudad Juárez pasó de no tener un sistema BRT a contar con tres líneas en menos de un año. Sin embargo, la rapidez en la implementación genera dudas sobre la calidad y durabilidad del proyecto.
Voces críticas en Juárez señalan que el transporte público sigue enfrentando problemas estructurales, como tiempos de espera prolongados y cobertura insuficiente en ciertas zonas. Aunque el gobierno celebra el JuárezBus como un éxito, muchos usuarios aún esperan mejoras tangibles en su experiencia diaria.
Maru Campos ha insistido en que el JuárezBus es una muestra de su compromiso con los chihuahuenses. En eventos públicos, la gobernadora no pierde oportunidad de destacar los supuestos beneficios del sistema. Pero la ciudadanía se pregunta si estas declaraciones son más un ejercicio de imagen que una solución real.
Por su parte, Santiago de la Peña defiende el proyecto como un paso hacia la modernización. Según él, los 104 autobuses que conforman la flotilla del JuárezBus representan un cambio histórico para la ciudad. Sin embargo, la falta de transparencia en los costos totales del proyecto ha levantado sospechas.
Mientras el gobierno estatal aplaude el JuárezBus, la verdadera prueba está en las calles. Los juarenses serán quienes, con el tiempo, determinen si este sistema es el gran logro que se promociona o si, como otros proyectos, queda en promesas vacías. Por ahora, la felicitación de Campos a De la Peña suena más a estrategia política que a un triunfo consolidado.