La tarde del viernes 9 de mayo de 2025, intensas lluvias azotaron varios municipios del Estado de México, dejando un rastro de inundaciones y caos en Tecámac y Ecatepec. Las calles se convirtieron en ríos, afectando la movilidad y generando retrasos en el transporte público, especialmente en el servicio del Mexibús.
En Tecámac, las colonias más golpeadas fueron Ojo de Agua, Loma Bonita y Ozumbilla. Las avenidas principales, como la carretera México-Pachuca, quedaron prácticamente intransitables debido a los encharcamientos. Vecinos reportaron que el agua alcanzó niveles alarmantes, dificultando el paso de vehículos y peatones.
Ecatepec no corrió mejor suerte. Colonias como Santa María Chiconautla y Ciudad Cuauhtémoc sufrieron severas inundaciones. La Vía José López Portillo, una de las arterias viales más importantes, quedó bajo el agua, dejando a decenas de automovilistas varados y afectando el servicio de transporte público.
La respuesta de las autoridades locales ha sido insuficiente para muchos. Aunque cuadrillas de Protección Civil y equipos de desazolve trabajaron durante la noche para reducir los niveles de agua, los habitantes señalan que la falta de mantenimiento en el drenaje agrava estos problemas cada temporada de lluvias.
Videos y fotos compartidos en redes sociales muestran la magnitud del desastre. En algunos puntos, el agua superó el medio metro de altura, obligando a las personas a buscar refugio o a cruzar las calles en camiones para evitar quedar atrapadas.
El pronóstico no es alentador. Según el Servicio Meteorológico Nacional, se esperan más lluvias este sábado 10 de mayo en el Valle de México. Las autoridades han pedido a la población tomar precauciones, pero muchos cuestionan por qué no se han implementado soluciones definitivas.
La basura acumulada en las coladeras y la falta de infraestructura adecuada son señaladas como las principales causas de estas inundaciones recurrentes. Vecinos de ambas localidades exigen acciones concretas para evitar que cada lluvia se convierta en una pesadilla.
Mientras tanto, el caos vial y las afectaciones continúan. Miles de personas enfrentan retrasos y dificultades para llegar a sus destinos, en un problema que parece no tener fin en el horizonte.
La situación en Tecámac y Ecatepec es un reflejo de los retos que enfrentan muchos municipios del Estado de México en temporada de lluvias. La indignación crece entre los habitantes, que sienten que sus comunidades son olvidadas.
A pesar de las promesas de mejora, las inundaciones siguen siendo una constante. La pregunta que todos se hacen es: ¿hasta cuándo seguirán viviendo bajo el agua cada vez que llueve?