En su primera audiencia como líder de la Iglesia católica, el papa León XIV, el primer pontífice estadounidense, marcó el inicio de su papado con un mensaje claro: seguirá la “valiosa herencia” de su predecesor, el papa Francisco. Robert Prevost, quien asumió el nombre de León XIV tras ser elegido el 8 de mayo, destacó la importancia de mantener las prioridades de Francisco, enfocadas en la atención a los más vulnerables.
Durante su discurso ante el Colegio de Cardenales, León XIV subrayó el “cuidado amoroso de los débiles” como un pilar de su misión. Este enfoque, heredado de Francisco, busca poner en el centro a los marginados y necesitados, una constante en el papado anterior que resonó en todo el mundo.
El nuevo papa también sorprendió al señalar a la inteligencia artificial como uno de los mayores retos para la humanidad. En un mundo cada vez más tecnológico, León XIV advirtió sobre la necesidad de abordar los desafíos éticos que plantea la IA, desde su impacto en la sociedad hasta su influencia en la fe.
León XIV reconoció que la Iglesia debe responder a lo que llamó “una nueva revolución industrial”. Este posicionamiento lo coloca como un líder dispuesto a dialogar con los avances del siglo XXI, manteniendo los valores cristianos en el centro de la conversación.
El pontífice expresó su compromiso con las reformas del Concilio Vaticano II, un hito que modernizó la Iglesia en los años 60. Este guiño a la continuidad busca tranquilizar a quienes temían un cambio drástico tras la muerte de Francisco el pasado 21 de abril.
En su mensaje, León XIV también abogó por un “diálogo valiente y confiado” con el mundo contemporáneo. Este llamado refleja su intención de tender puentes entre la Iglesia y las realidades actuales, desde los desafíos tecnológicos hasta las crisis sociales y ambientales.
El nuevo papa no evitó mencionar las controversias que han marcado su trayectoria. Durante su tiempo como misionero en Perú, fue cuestionado por presunto encubrimiento en casos de abuso, aunque nunca enfrentó denuncias formales. León XIV parece dispuesto a enfrentar estos señalamientos con transparencia.
A sus 69 años, León XIV asume el papado en un momento crucial para la Iglesia católica. Su elección, tras un cónclave que culminó con humo blanco en la Capilla Sixtina, ha generado expectativas y debates en todo el mundo.
Con un enfoque que combina tradición y modernidad, el papa León XIV inicia su liderazgo con un mensaje de esperanza y responsabilidad. Su atención a la inteligencia artificial y a los más vulnerables marca el rumbo de un papado que busca ser relevante en un mundo en constante cambio.
La Iglesia católica, bajo su guía, enfrenta ahora el desafío de adaptarse a una era tecnológica sin perder su esencia espiritual. El mundo observa con atención los primeros pasos de este pontífice estadounidense.

Imagen generada por IA con fines informativos o representativos. Digital Plural se deslinda de cualquier uso o interpretación.
El papa León XIV promete continuar el legado de Francisco y enfrenta los desafíos de la inteligencia artificial
Compartir: