En un nuevo episodio que pone en evidencia la inseguridad en las calles de Monterrey, una mujer de 66 años sufrió un grave accidente al caer en un registro sin tapa. El incidente ocurrió en una transitada zona de la ciudad, donde la falta de mantenimiento pone en riesgo a los ciudadanos.
La víctima, cuya identidad no ha sido revelada, caminaba por la acera cuando, sin previo aviso, cayó en el registro abierto. Testigos aseguran que no había señalización alguna que advirtiera del peligro, lo que resalta la irresponsabilidad de las autoridades locales.
El hecho tuvo lugar en una calle céntrica, donde los registros de servicios públicos suelen ser un problema recurrente. Vecinos de la zona han denunciado en repetidas ocasiones la falta de tapas y el mal estado de las instalaciones, sin que el municipio tome medidas efectivas.
La mujer fue atendida de inmediato por paramédicos que llegaron al lugar. Según reportes iniciales, sufrió lesiones en las piernas y contusiones múltiples, por lo que fue trasladada a una clínica cercana para recibir atención médica.
Este incidente no es un caso aislado. En Monterrey, los reportes de accidentes causados por registros sin tapa o banquetas en mal estado son cada vez más frecuentes, lo que refleja un abandono en el mantenimiento urbano por parte de las autoridades.
Ciudadanos que presenciaron el accidente expresaron su indignación. Algunos señalaron que han reportado estos peligros al municipio sin recibir respuesta, lo que genera una sensación de impotencia y desconfianza hacia el gobierno local.
Las lesiones de la mujer, aunque no se han detallado como graves, podrían haber tenido consecuencias fatales. Este tipo de incidentes pone en riesgo especialmente a adultos mayores y personas con movilidad reducida, quienes son más vulnerables.
La falta de acción por parte de las autoridades municipales ha encendido las alarmas entre los regiomontanos. La negligencia en el mantenimiento de las vialidades no solo afecta la calidad de vida, sino que representa un peligro constante para todos.
Este accidente es una muestra más de los problemas de inseguridad que aquejan a Monterrey, no solo en términos de delincuencia, sino también en la infraestructura urbana. La ciudadanía exige soluciones inmediatas para evitar más víctimas.
Mientras tanto, la mujer de 66 años se recupera en la clínica, pero su caso es un recordatorio de que la indiferencia de las autoridades puede tener consecuencias directas en la vida de los ciudadanos. La pregunta sigue en el aire: ¿hasta cuándo se tomarán medidas serias?