La designación de Adrián Rubalcava como nuevo director del Metro de la Ciudad de México ha desatado una tormenta política. Ricardo Monreal, coordinador de Morena en el Senado, expresó su respaldo a esta decisión, asegurando que confía en que Rubalcava logrará ganarse a los militantes del partido. Sin embargo, la llegada de un ex priista a un cargo clave levanta sospechas y críticas entre las bases morenistas.
Rubalcava, exalcalde de Cuajimalpa y figura conocida por su trayectoria en el PRI, fue nombrado por la jefa de Gobierno, Clara Brugada. Este movimiento ha generado desconcierto, especialmente porque Rubalcava no cuenta con experiencia técnica en transporte público. Su pasado político, ligado a prácticas del viejo régimen, choca con el discurso de transformación que pregona Morena.
Monreal, en un evento en las instalaciones del Metro, defendió la designación y afirmó que Rubalcava será evaluado por sus resultados. Según el senador, el ex priista tiene la capacidad de “sacarse la espina” y demostrar su compromiso con los ideales de la Cuarta Transformación. Pero las palabras de Monreal no han convencido a todos, y las redes sociales ya arden con críticas.
La polémica se intensifica por un video que circula en redes, grabado durante la celebración del cumpleaños del empresario José Luis Salinas. En él, se destapa el nombramiento de Rubalcava y se hacen comentarios despectivos sobre Tlaxcala, lo que ha sido calificado como clasista por usuarios y políticos. Rubalcava incluso pidió no difundir el video, consciente del impacto que podría tener.
Las bases de Morena no han tardado en reaccionar. Muchos militantes ven la llegada de Rubalcava como una traición a los principios del partido. Acusan a Monreal y a Brugada de abrir la puerta a expriistas que no comparten la ideología de la 4T, solo para consolidar alianzas políticas. La frase “Morena no combate al PRIAN, lo acomoda” se ha vuelto viral en redes.
Por su parte, Rubalcava ha prometido trabajar con el equipo del Sistema de Transporte Colectivo para “dar resultados positivos”. Sin embargo, su falta de experiencia en la gestión de un sistema tan complejo como el Metro genera dudas. Los capitalinos, que enfrentan diariamente retrasos y fallas en el servicio, esperan que esta designación no sea un nuevo tropiezo.
El respaldo de Monreal a Rubalcava también pone en el reflector las tensiones internas en Morena. Mientras el senador busca posicionarse como un líder conciliador, su apoyo a figuras controvertidas como Rubalcava podría costarle el apoyo de las bases. La designación, además, ocurre en un contexto de creciente descontento con la gestión de Brugada en la Ciudad de México.
La gobernadora de Tlaxcala, Lorena Cuéllar, ha sido instada a pronunciarse sobre los comentarios despectivos hechos en el video. Hasta ahora, no ha emitido declaraciones, pero la presión en redes sociales crece. Este escándalo amenaza con convertirse en un dolor de cabeza para Morena, justo cuando el partido busca mantener su hegemonía en la capital.
El futuro de Rubalcava al frente del Metro es incierto. Su capacidad para cumplir con las expectativas de los usuarios y ganarse la confianza de los morenistas será crucial. Por ahora, su nombramiento no solo ha generado división, sino que ha reavivado el debate sobre la coherencia ideológica de Morena y su relación con el pasado priista.
Mientras tanto, los capitalinos observan con escepticismo. El Metro, un sistema vital para millones, no puede permitirse más experimentos fallidos. La pregunta en el aire es si Rubalcava logrará superar las críticas y demostrar que merece el cargo, o si este movimiento será recordado como otro error de la 4T.