La Comisión Nacional del Agua ha lanzado una advertencia urgente para Nuevo León, donde se espera un clima severo este jueves. Según el pronóstico, existen condiciones para la formación de torbellinos o tornados, acompañados de lluvias intensas, descargas eléctricas y posible caída de granizo en varias zonas del estado.
El Servicio Meteorológico Nacional indicó que estas condiciones afectarán principalmente el norte de Nuevo León, incluyendo municipios como Anáhuac, Lampazos de Naranjo, Sabinas Hidalgo, Vallecillo, Agualeguas, Parás, Bustamante y Villaldama. Las autoridades han señalado que el riesgo de tornados es significativo, algo poco común pero no inédito en la región.
Además de los tornados, se prevén rachas de viento de hasta 80 kilómetros por hora, lo que podría generar tolvaneras y complicaciones en carreteras. La caída de granizo, de diferentes tamaños, representa otro peligro, especialmente para automóviles y estructuras al aire libre.
Protección Civil de Nuevo León ha exhortado a la población a tomar precauciones extremas. Entre las recomendaciones están evitar cruzar ríos o arroyos, resguardarse en lugares seguros y proteger vehículos ante la posible caída de granizo. También se sugiere mantenerse informado a través de canales oficiales.
El origen de estas condiciones meteorológicas se debe a una línea seca sobre el norte de México, combinada con un sistema frontal y la corriente en chorro subtropical. Esta interacción está generando inestabilidad atmosférica, lo que incrementa el riesgo de fenómenos severos en la región noreste del país.
En el Área Metropolitana de Monterrey, las autoridades han advertido sobre posibles encharcamientos e inundaciones en zonas vulnerables. La lluvia intensa podría afectar la movilidad urbana, especialmente en avenidas propensas a acumular agua.
A pesar de las alertas, el pronóstico indica que las temperaturas en Nuevo León seguirán cálidas, con un ambiente bochornoso durante el día. Sin embargo, las tormentas podrían traer un descenso temporal en las temperaturas, especialmente en las zonas más afectadas por las precipitaciones.
Este tipo de fenómenos extremos, aunque no son frecuentes, han ocurrido en el pasado en el noreste de México. La combinación de frentes fríos, líneas secas y humedad del Golfo de México puede desencadenar tormentas severas, especialmente en primavera.
Las autoridades han insistido en la importancia de la prevención. Identificar refugios seguros dentro del hogar, alejarse de ventanas y evitar salir a la intemperie son medidas clave para protegerse ante la posible llegada de un tornado o fuertes vientos.
La población de Nuevo León se mantiene atenta a las actualizaciones meteorológicas, mientras las autoridades refuerzan la vigilancia en las zonas de mayor riesgo. Este jueves, la prioridad es la seguridad ante un clima que promete ser desafiante.