El Senado de Pensilvania aprobó una propuesta que busca prohibir la participación de deportistas transgénero en equipos deportivos femeninos en escuelas y universidades. La votación, con 32 votos a favor y 18 en contra, refleja una división significativa en el debate sobre la equidad en el deporte.
La iniciativa establece que solo las atletas identificadas como mujeres al nacer podrán competir en categorías femeninas. Los impulsores argumentan que esta medida protege la integridad de los deportes femeninos, citando diferencias biológicas que, según ellos, otorgan ventajas competitivas.
El proyecto de ley surge en un contexto de controversia nacional sobre la participación de personas transgénero en el deporte. Casos como el de la nadadora Lia Thomas, quien ganó un título universitario en 2022, han avivado el debate sobre la justicia en las competencias femeninas.
Algunos senadores demócratas, como James Malone de Lancaster, se unieron a los republicanos en la aprobación de la medida. Sin embargo, el proyecto enfrenta un camino difícil, ya que el gobernador demócrata Josh Shapiro podría vetarlo, según fuentes legislativas.
Organizaciones defensoras de los derechos transgénero han criticado la iniciativa, calificándola de discriminatoria. Argumentan que excluye a las atletas transgénero y perpetúa estigmas, limitando su acceso a oportunidades deportivas.
Por otro lado, defensores de la propuesta insisten en que busca garantizar un entorno competitivo justo. Señalan que otras entidades, como la Asociación Atlética Intercolegial de Estados Unidos, han adoptado restricciones similares en los últimos años.
La decisión del Senado se alinea con medidas impulsadas en otros estados, donde al menos 20 gobiernos han implementado límites a la participación de deportistas transgénero en categorías femeninas. Esto refleja una tendencia creciente en el ámbito legislativo estadounidense.
El debate no termina aquí. Si el proyecto supera el veto del gobernador, podría sentar un precedente en Pensilvania, afectando a miles de estudiantes y atletas en escuelas y universidades públicas.
A nivel nacional, el tema sigue dividiendo opiniones. Mientras algunos celebran estas restricciones como una defensa del deporte femenino, otros las ven como un retroceso en los derechos de las personas transgénero.
La discusión sobre la equidad, la inclusión y la biología en el deporte promete continuar, con Pensilvania como uno de los epicentros de este complejo debate.